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Los números y los datos no mienten. La catástrofe humanitaria que vive México, ocasionada por el virus del COVID-19, está fuera de control, cosa que se hace evidente por sus cifras de contagios y de muertes, y por todos aquellos que se han tenido que quedar en su casa porque no alcanzaron cama o ventilador, o aquellos que cuando llegaron al hospital, ya era demasiado tarde.

Y aún así, las mentiras, las medias verdades, la manipulación de información, los desplantes, las frivolidades, las burlas, las altanerías, los absurdos, pero sobre todo el CINISMO del Dr. Hugo López-Gatell no ha tenido fin.

El Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud ha mentido a los mexicanos desde un principio, haciendo recomendaciones y comentarios irresponsables y a la ligera, como decir que el COVID-19 no iba a ser más peligroso que la influenza, que el pico máximo de la pandemia iba a ser en mayo, que el cubrebocas no era más que un elemento para dar tranquilidad y apaciguar las emociones, que el realizarnos la prueba era parte de una visión completamente fuera de lugar, que la situación estaba controlada.

Por ello, no debería sorprendernos que López-Gatell haya decidido tomarse sus vacaciones decembrinas, en medio de un caos en el que vemos largas filas de personas en busca de un tanque de oxígeno o de un espacio dentro de un hospital. Este cínico se pasea por Oaxaca sin tapa bocas, y haciéndose el sordo de la interminable solicitud de su misma institución de que nos quedemos en casa, mientras el personal médico se desvive atendiendo una interminable cantidad de pacientes día a día.

Finalmente, sus incongruencias no son cosa nueva, ya que han sido casi once meses de desaciertos y soberbia de aquel que parecía muy conocedor y especialista, y que fue nombrado vocero durante la crisis sanitaria. La realidad es que este personaje no ha hecho más que navegar sin rumbo y lograr que México este catalogado como el “peor país” para vivir en tiempos de Coronavirus y hoy recibe por parte de familiares de víctimas y adversarios el mote de “Dr. Muerte”.

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