El “rebrote” no rebrote de COVID en México

Twitter: @YessUrbina

A casi 8 meses desde que se inició la Jornada Nacional de Sana Distancia y a 5 meses desde la Nueva Normalidad, el panorama respecto a la pandemia por COVID-19 en México no ha cambiado, el promedio de casos confirmados diariamente se mantiene sin mostrar reducciones significativas que nos permitan afirmar que realmente se ha “domado” la pandemia. Antes de hablar de un rebrote, es necesario poner en su justa dimensión las acciones gubernamentales que han emprendido.

Hasta ahora, Chihuahua y Durango han vuelto a semáforo rojo y muy probablemente Coahuila y Nuevo León también, la mayoría se encuentran en semáforo naranja y solo Campeche se encuentra en semáforo verde. El modelo de comunicación mediante las conferencias vespertinas se mantiene, pero sin tener ni de cerca la misma relevancia de hace algunos meses y es que el Gobierno Federal se ha estancado en las acciones respecto a la pandemia. Sin una reducción significativa de casos, no se renovó el convenio con los hospitales privados ni se cuenta con un sistema de información robusto, transparente y accesible para la ciudadanía.

Desde el Programa Interdisciplinario de Rendición de Cuentas del CIDE nos dimos a la tarea de proponer un modelo de rendición de cuentas y combate a la corrupción en el contexto de la pandemia, aludiendo primero, a la fundamental tarea que implica la toma de decisiones en los distintos niveles de gobierno, con el fin de que éstas puedan ser comunicadas bajo una explicación y justificación transparentes que respalden el plan aterrizado mediante liderazgos responsables en la gestión de una crisis sanitaria.

Para esto, es fundamental contar con la información necesaria y, no lo decimos nosotros, lo marcan los protocolos de gestión de crisis sanitarias de la OMS, organismos internacionales e incluso los Protocolos nacionales de la administración anterior. Estos sistemas de información también permiten a la ciudadanía conocer todo lo relevante respecto a la pandemia, desde el número de casos hasta las adquisiciones y contrataciones públicas, con total transparencia. Hasta ahora, el sistema de datos más cercano al idóneo es el de la Ciudad de México, donde sin duda, no han escatimado esfuerzos en brindar un sistema de datos eficiente, accesible y actualizado. Mientras que el provisto por el Gobierno Federal presenta deficiencias en la calidad y actualización de la información, que es el último punto de la propuesta, que estos sistemas de información y la toma de decisiones con base en su uso puedan ser publicadas de forma eficiente y transparente.

A 8 meses, la pandemia sigue latente y el escenario empeorará debido a la poca corresponsabilidad social y política. Repetir el mismo escenario con las mismas decisiones aumentará la tragedia que sigue cobrando la vida de cientos de mexicanos todos los días. El manejo de la pandemia requiere de un gobierno sólido, capaz de tomar decisiones ordenadas y coordinadas que permitan a las personas en mayor situación de vulnerabilidad mantenerse a salvo, es bien sabido que estos sectores son los que se vieron más afectados con el desempleo y la imposibilidad de mantenerse en casa para solventar sus necesidades básicas.

Más allá de la coyuntura electoral, la discusión por el presupuesto del año entrante y las disputas cotidianas, es importante que no perdamos de vista que la pandemia continúa y las acciones para enfrentarla en sus distintos ámbitos, no deben reducirse ni pasar a segundo o tercer plano, al contrario, deben preverse con mayor antelación porque en México no estamos ante un rebrote, estamos ante la continuación de una crisis que no se ha logrado superar y que puede causar estragos aún más fuertes.

Estamos ante un escenario de incertidumbre y las decisiones que se tomen a partir del retorno a semáforo rojo de los estados, la resistencia del presidente a usar cubrebocas, los resultados de los ensayos clínicos de la vacuna en territorio nacional y la prevalencia de los casos confirmados y muertes, marcarán pauta para nuestro futuro inmediato. La crisis sigue entre nosotros y no podemos bajar la guardia.

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