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En esta ocasión, me daré a la tarea de identificar las tendencias generales y algunos horizontes respecto a las políticas de cannabis con enfoque en Norteamérica, tomando en cuenta el actual proceso global de flexibilización.

La flexibilización internacional sobre cannabis es uno de los ejemplos donde se observa la tensión en el consenso internacional sobre prohibición de drogas.

Quizá los actuales debates y la posible re-clasificación en los órganos del Sistema Internacional de Fiscalización de la ONU y la expansión económica de las farmacéuticas que desarrollan derivados farmacológicos del cannabis, han aceitado las urgencias regulatorias, aunadas a los procesos de reforma interna, como las legalizaciones en algunos estados de la Unión Americana y Canadá asi como el amplio trabajo de la sociedad civil organizada en muchas ocaciones liderada por usuarios politizados.

En este orden de ideas, a un año de la legalización en Canadá y a casi 8 años de la legalización en los estados de Colorado y Washington, el mercado se percibe estabilizado, incluso habiendo mayor producto, que demanda y las noticias respecto a la escasez de stock de mariguana para venta de uso adulto parecen solo ser parte de las primeras semanas de venta y por el contrario el debate pro regulatorio se ha fortalecido.

Por lo que este año, habrá 16 estados en Estados Unidos que contemplan algún esquema de flexibilización, legalización, despenalización o regulación.

Estos cuales abarcan iniciativas ciudadanas para legalizar mariguana recreativa o para uso adulto, cannabis medicinal con o sin derivados farmacéuticos, hasta iniciativas de ley impulsadas por los mismos gobiernos de los estados. Y se espera que sea un tema durante la campaña presidencial.

A continuación enumero en orden alfabético donde habrá actividad: Arizona, Arkansas, Connecticut, Dakota del Norte y Dakota del Sur, Florida, Idaho, Mississippi, Missouri, Montana, Nueva Jersey, Nueva York, , Ohio, Oklahoma, Rhode Island y Nebraska. Algunos estados como Arizona y Florida cuentan con el antecedente de 2016 donde las iniciativas regulatorias no lograron imponerse por el sí, por lo cual se han desplegado esfuerzos de grupos activistas y lobby de la industria cannábica. Habría que señalar que, se encuentra en la Cámara de Representantes un proyecto de ley para que se permita el uso de la Banca, ya que las actuales normas impiden el uso de servicios financieros para depositar o hacer operaciones derivadas de los negocios de cannabis en Estados Unidos, a diferencia de Canadá que si es permitido.

En lo que respecta la producción, al menos lo declarado legalmente, el mercado de cannabis Canadiense y en Estados Unidos se encuentra estable y con sistemas suficientes de abastecimiento para el mercado lícito. Por su parte lo que concierne al ambiente ilícito es difìcil establecer cifras confiables, algunos especialistas señalan que la tendencia a la baja en la producción para exportación de mariguana Mexicana, indica un posible declive de la producción nacional para el tráfico ilícito internacional, cuestión que se sostiene con los datos proporcionados por agencias de seguridad mexicanas, las cuales señalan que a pesar de que los traficantes de drogas mexicanos son los dominantes en la región, el mercado internacional de cannabis les ha dejado de ser rentable. Y por el contrario, la producción mexicana de cannabis que se encuentra en el mercado local ilícito cada vez es mas sofisticada, al igual que los cultivadores y usuarios politizados, por lo que se intuye que los productores en EUA y Canadá se han vuelto autosuficientes.

A manera de cierre mencionaría que: en México la regulación será inevitable y el Congreso está obligado a emitir alguna reforma que será presentada en los próximos meses, también señalaría que la implementación será paulatina y aún no es claro el esquema, lo que si es un hecho es que no hay ruta que logre esquivar la responsabilidad institucional ya que las fechas y plazos han sido impuestas por la corte.