Las imágenes de estas dos especies de dragones de mar son tan alucinantes como hipnóticas
Existen tres especies de dragones de mar: el dragón marino común (Phyllopteryx taeniolatus), el dragón marino foliaceo (Phycodurus eques) y el dragón marino rojo (Phyllopteryx dewysea), del que apenas y los biólogos marinos han podido tomar imágenes. Sin embargo, las otras dos especies son bien conocidas, y si no, al menos lo son en Australia.
Ambas especies endémicas de las aguas del sur y el este de Australia, pertenecen a la familia de los caballitos y agujas de mar, pero en realidad son muy distintos entre sí. Aunque comparten algunas características como su alargado hocico tubular, su cuerpo con revestimiento óseo e incluso, su incapacidad para protegerse de los depredadores -o sea, buzos-, cuentan con algunas singularidades.
El dragón marino foliaceo tal vez sea el que cuente con la apariencia más extraña: parece un alga móvil que cuenta con espinas que le sirven como defensa. Tiene una serie de aditamentos con forma de hojas que pueden ser de color marrón a amarillo, y que le sirven como camuflaje, aunque no las utilizan para nadar. En cambio, para moverse utilizan dos aletas ubicadas en su dorso y pectoral, que son muy delgadas y transparentes. De acuerdo con National Geographic, a inicios de la década de 1990, al ser declarada una especie en peligro, el gobierno australiano tuvo que protegerlos, y no precisamente a causa por los altos índices de contaminación y la pérdida de su hábitat, sino por los buzos que buscaban mantenerlos como mascotas.

Por otro lado, digamos que el dragón marino común es más simple de encontrar. No cuenta con una mecanismo de camuflaje tan preciso como el Phycodurus eques, aunque también tiene forma de alga y cuenta con algunas prolongaciones que se asemejan a la forma de una planta. Pero aún así, esta especie de dragón marino cuenta con más variaciones en las tonalidades que adornan su cuerpo. Según L' aquárium de Barcelona, estos peces pueden llegar a medir hasta 45 centímetros; y a diferencia de los caballos de mar machos, que alojan a sus crías dentro de una bolsa, cuentan con una especie de parche en su parte inferior en donde se adhieren los huevos durante cuatro o semanas hasta la gestación.
Estos peces son genuinamente hermosos, y mirar estos videos en los que han sido captados, es como haber ido a un acuario. Son hipnotizantes: