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¿De qué murió Onésimo Cepeda Silva, Obispo Emérito de Ecatepec?

El obispo siempre estuvo rodeado de polémicas, debido a sus relaciones con políticos y poderosos empresarios
martes, 1 de febrero de 2022 · 10:22

Este 31 de enero de 2022, se dio a conocer que el obispo emérito de la Diócesis de Ecatepec, Onésimo Cepeda Silva, falleció a los 84 años, debido a complicaciones derivadas del Covid 19. Cepeda se contagió el 9 de enero y diez días después tuvo que ser hospitalizado y conectado a un respirador artificial, ya que presentaba un cuadro grave de neumonía.

La Conferencia del Episcopado Mexicano informó su muerte este lunes a las 20:30 horas. Onésimo Cepeda Silva sirvió 16 años a la Diócesis de Ecatepec, de la cual fue parte en su fundación, por lo que se le realizará un novenario para su eterno descanso.

Onésimo Cepeda Silva nació en la Ciudad de México, el 21 de marzo de 1937. Cursó sus estudios de Derecho en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); posteriormente, Filosofía, en el Seminario de los Misioneros de Guadalupe, y Teología, en la Pontificia Universidad de Friburgo en Alemania.

En 1995, fue nombrado Primer Obispo de Ecatepec, por el papa Juan Pablo II. Y luego de cumplir los 75 años de edad, en 2012 presentó su renuncia para poder jubilarse.

Polémicas en las que se vio envuelto Onésimo Cepeda Silva

Onésimo no fue un obispo cualquiera, debido a sus declaraciones estridentes y su cercanía con las élites políticas y económicas del país. Mientras fungía como primer obispo de Ecatepec, enfrentó problemas legales y de otros ámbitos.

Cepeda Silva no siempre estuvo dedicado a la religión, en un tiempo fue agente de Bolsa y director de banca privada. Junto al empresario Carlos Slim, en los años sesenta fundó la casa de Bolsa “Inversora Bursátil”, conocida ahora como Grupo Financiero Inbursa. También se desempeñó como presidente del grupo financiero Banamex, así como director ejecutivo de Banamex City Group, de Ingenieros Civiles Asociados (ICA) y de Televisa.

En el 2009, sus declaraciones causaron gran polémica, al expresar que: “El Estado laico es una jalada”, esto como parte de su desacuerdo con la aprobación de las bodas entre parejas del mismo sexo y la posibilidad de que adopten hijos, que otorgó el Gobierno del Distrito Federal y la Asamblea Legislativa capitalina.

En noviembre de 2010, Onésimo Cepeda Silva fue acusado de fraude y lavado de dinero, por apropiarse de 42 pinturas de artistas locales y extranjeros con un valor de 130 millones de dólares, incluidas en el testamento de un miembro de la familia Azcárraga, quien murió en 2003, y por las cuales presentó pagarés de dudosa veracidad. Finalmente, el fallo de un tribunal impidió su detención.

En 2011, no dudo en expresar su apoyo en una carta enviada al empresario y ex alcalde de Tijuana, Jorge Hank Rhon, quien fue detenido por el delito de acopio de armas, incluso dijo que las oraciones de su clero estaban con él.

Durante las elecciones presidenciales de 2012, Onésimo Cepeda Silva se pronunció y pidió al próximo mandatario que solo robara "poquito" ya que todos los políticos eran unos “ratas”.

En su fiesta de 70 años, como parte de la serie de eventos ostentosos y de derroche que organizaba, tuvo de invitado al ex mandatario Enrique Peña Nieto y además de expresarle su máximo apoyo al entonces candidato, confesó que entre sus amigos políticos ponía en primer lugar al priista. También acudieron Mario Marín, el empresario Alfredo Harp Helú, José Ángel Córdova, y Carlos Slim Domit.

En abril de 2021, Cepeda Silva fue presentado como abanderado del extinto partido político, Fuerza por México, para una precandidatura a diputado plurinominal de Ecatepec, sin embargo, al día siguiente se retractó y anunció que no competiría por el cargo, para no perder su condición sacerdotal.