Industria Mexicana de Coca-Cola en favor de un desarrollo sostenible para frenar el cambio climático

Si observamos detenidamente desde cuando los líderes del mundo se han preocupado por el cambio climático con relación a los años que llevamos de existir en la tierra, veremos que es como si esto hubiera comenzado a tomar relevancia desde hace apenas unos minutos. Sin embargo, es crucial tomar acciones antes de que sea demasiado tarde.

Las señales de que nuestro mundo se está deteriorando cada vez un poco más son bastas, sin embargo, la diferencia entre preocuparse y tomar acción es solamente dar el primer paso. Esto lo saben millones de personas alrededor del globo y dentro de nuestro país que han decidido ocuparse dentro de sus posibilidades y límites.

Reciclar, cuidar el agua y hacernos cargo de nuestros propios residuos son acciones que podemos realizar “desde nuestra trinchera” y que llevados a una escala mayor comprobarán el compromiso que una persona, comunidad, sociedad o país tienen con el medio ambiente.

La Industria Mexicana de Coca Cola (IMCC) es una de las empresas que se ha encargado de hacer valer su compromiso no solo con la sociedad, sino con el medio ambiente, pues ha emprendido desde hace ya varios años una serie de acciones que se realizan bajo un eje en el que se trabaja en los temas del agua, reciclaje y empaques sustentables.

“Mundo sin Residuos” es la meta que se han trazado a nivel global para recuperar y reciclar cada envase que es producido, de forma que para el año 2030 cada uno de ellos sea creado con al menos al 50% de material reciclado.

Lo anterior se logra a través de sus plantas de reciclaje, PetStar, la más grande del mundo, e IMER. Así, la IMCC se ha consolidado como el reciclador número uno de México cuando se habla de PET grado alimenticio. Sus dos plantas en conjunto pueden reciclar 4 mil 100 milones de botellas, unas 85 toneladas de PET al año, cantidad necesaria como para llenar unas 3 veces el Estadio Azteca.

La Industria Mexicana de Coca-Cola además tiene el objetivo de limpiar el agua en las comunidades donde opera, por lo que este año realizó una inversión de más de $170 millones de pesos para la construcción de cuatro humedales basados en la naturaleza, que tratarán el agua en comunidades del Estado de México, Baja California, Jalisco y Quintana Roo, para su reaprovechamiento en procesos productivos. 

A estos esfuerzos se suma el continuar trabajando para devolver a la naturaleza el 100% del agua empleada en la elaboración de sus productos, además de la construcción de techos y ollas captadoras de agua, cisternas comunitarias, plantas de tratamiento y purificadoras, con las que hoy ha conseguido beneficiar a más de 500 mil mexicanos de la mano con Fundación Coca-Cola.