Abrazos y besos después de 100 días de confinamiento

Una de las muchas cosas que no nos permite hacer el COVID-19 es el contacto físico. La pandemia ha detenido al mundo en varios aspectos, per una de las cosas que más se resienten es poder abrazar o besar a tus seres queridos.

En el caso de los adultos mayores, que se denominan población vulnerable, el contacto físico e y la cercanía a otros fueron restringidas. Las organizaciones y autoridades recomendaron que este grupo de la población no fuera expuesto y que para evitar el incremento de posibilidad de contagio, debían mantenerse aislados y de preferencia, sin tocar a otros.

Poco a poco el virus comienza a ceder y las actividades regresan a la normalidad. Entre estas actividades, los abrazos y besos, son acciones que han regresado en varios lugares del mundo.

Estas son algunas de las historias de abrazos y besos, en una residencia de Barcelona, entre personas mayores tras 100 días o más de aislamiento.

Se vivieron momentos emotivos en esta residencia española, en donde después de 100 días de confinamiento y aislamiento social, los ancianos, pudieron verse, abrasarse y besarse a través de un plástico transparente.

Este es el caso de Agustina y Pascual, dos ancianos de 81 y 84 años, respectivamente, que tras 102 días de confinamiento se pudieron besar. Una lámina de plástico transparente, sin embargo, los separaba para evitar el contagio de Coronavirus.

Esta otra historia, de Dolores de 61 años y su padre José de 87 años, se abrazan por primera vez después de estar separados 4 meses.

La directora del asilo de Barcelona, asegura que el contacto físico es’ fundamental y acaricia el alma’ de una persona. En este proceso de reencuentro, el asilo utilizó un delgado plástico transparente que era desinfectado al finalizar los encuentros.

La directora compartió que aunque han pasado momentos muy duros, en las residencias para adultos mayores, ahora están muy bien.