Guía para hacer home office y no morir en el intento

Sí eres de los afortunados que tendrán la oportunidad de hacer home office es necesario que seas consciente de la responsabilidad que dicha actividad conlleva y que a su vez te prepares para eso pues trabajar desde casa requiere de un gran esfuerzo y planeación, por eso te compartimos una guía infalible.

Cualquiera pensaría que laborar desde casa es sencillo, sin embargo, no hay que perder de vista que aunque es más cómodo, no deja de ser trabajo y por ello tendrás que ser rígido y tomar ciertas medidas, en referencia a lo anterior te damos este manual que te servirá para explotar lo mejor de dicha actividad.

• Lo primero que tienes que tomar en cuenta es que deberás realizar una lista de las cosas que planeas lograr durante la jornada laboral, así como programar pequeños descansos para hacer del trabajo algo más ameno.

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• Prohibido trabajar en cama; sabemos que es el sueño de muchos pero no es la mejor decisión, la ilustradora mexicana conocida como Maremoto comparte que si trabajas en un lugar que originalmente es para descasar, con el tiempo ya no podrás hacerlo de la misma manera.

Además, es recomendable buscar un lugar adecuado y con buena luz, de esta manera tu organización será mucho mejor.

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• No asistir a la oficina no quiere decir que tengas que estar todo el día en pijama, por disciplina procura estar aseado y bien vestido.

No es necesario andar de gala, aunque lo ideal es que te sientas cómodo procura no exagerar en la vestimenta pues eso también mantiene el rigor de tu labor profesional.

• Hacer home office puede hacer que olvides donde estás y pases un tiempo prolongado sin moverte, pero si lo piensas, es un buen momento para aprovechar y estirar las piernas y los brazos de vez en cuando.

Levantarte de tu asiento, hacer algunos estiramientos, saltar o caminar un poco puede ayudarte no solo a evitar el cansancio muscular, sino también a oxigenar el cerebro y mantenerte activo.

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• Trabajar en casa puede ocasionar que pierdas la noción del tiempo y que no respetes tus horarios. Así como en la oficina mantén tu jornada intacta, si es necesario puedes ponerte alarmas para la hora de la comida y salida, eso evitará que te sobrecargues de trabajo.

Y recuerda, si tu jornada laboral terminó deja todo y descansa.

Ahora pon en práctica esta guía y demuestra la eficacia que puedes tener aún laborando desde la comodidad de tu hogar.

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