¿Qué quiso decir Banco de México?

Durante 2021, Banco de México ha dado dos anuncios de política monetaria: uno en febrero y otro la semana pasada. El 11 de febrero, recortó la tasa de referencia en 25 puntos base para llevarla a 4.00%, después de haber dado una pausa en la última reunión de 2020, ante el repunte de inflación.

Todo indicaba que en marzo podría haberse dado otro recorte hasta poco antes de conocer el anuncio, incluso un miembro dijo que existía la posibilidad de que se observaron otras dos disminuciones en el año, mientras que otros aseguraban que lo mejor era continuar reduciéndola porque esperaban que si bien la inflación aumentaría, sería de forma limitada ante la debilidad económica y la posibilidad de que la recuperación no fuera tan notoria ante la incertidumbre en torno a la evolución de la pandemia, la producción y la distribución de las vacunas. En cambio, otros dos integrantes se mostraron más cautelosos e incluso preferían usar un tono más neutral en cuanto a inclinarse hacia una posición, y con más cautela, ante el “panorama incierto”.

Hasta febrero, la inflación general de la economía mexicana se había ubicado dentro del intervalo objetivo de Banxico (más menos 3.00%), sin embargo, en la primera quincena de marzo la inflación anual saltó a 4.12%, superando las previsiones de la mayoría del consenso económico nacional.

Como resultado, al día siguiente la Instancia Central anunció que todos sus miembros habían votado para que se mantuviera la tasa de referencia en 4.00%, enfatizando que esperan presiones sobre los precios al consumidor en los próximos meses, a causa del ajuste de los precios de los energéticos, los cuales habían registrado niveles muy bajos durante 2020. Además, destacaron que podrían observarse episodios de volatilidad en el peso mexicano, con lo que podrían afectar el desempeño inflacionario, así como los aumentos importantes que se han observado en las tasas de interés de mediano y largo plazos de los títulos gubernamentales. En resumen, el Organismo Monetario mexicano dejó claro que, a pesar de que había parecido que querían conservar tasas de interés más bajas para impulsar el consumo, la inversión y a la economía, su tarea es únicamente promover que la inflación sea baja y estable, y en estos momentos es “muy necesario” realizarlo después de haber observado que la inflación ha crecido por arriba de lo previsto.

De esta manera, se ha comenzado a considerar que Banxico podría no realizar ajustes en el nivel de la tasa de referencia en lo que resta del primer semestre, por lo que habría que estar atentos a la evolución de la economía y todas sus variables en los próximos meses, así como al ambiente institucional, a meses de que hayan elecciones en nuestro país y un próximo periodo vacacional.

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