Opinión

¿Política económica de cambio?

jueves, 24 de septiembre de 2020 · 16:04

Twitter: @JOHN_OLIVERA

Pese a la contingencia sanitaria de la Covid-19 los trabajos exteriores no han cesado en ningún momento. En las últimas semanas se mencionó por diversos medios de comunicación que se “frenó la crisis económica” ocasionada por este virus. El Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá ya es vigente, pero, según los expertos, los beneficios de este pacto se verían reflejados en uno o dos años más adelante.

¿Cuál es la problemática real en estos momentos de crisis sanitaria y económica?

Aunque en algunos países se están registrando datos significativos de la desaceleración de contagios y mortandad por este virus, por ejemplo, en Europa y Asía. En otros países no sucede lo mismo. Estados Unidos es el país del Continente Americano y del mundo que reporta el mayor número de contagios y decesos, con casi 7 millones de infectados y más de 200 mil personas muertas. En México suman más de 684,031 mil infectados y 72,129 defunciones confirmadas, lamentablemente.

¿Es seguro que se hicieron esfuerzos por parte del Gobierno Federal para disminuir el número de contagios y muertes en nuestro país?

Lamentablemente no. Tal parece que la situación económica importó más que la salud pública. Esto es debido a que no hubo una responsabilidad e inteligencia estratégica que marcara el rumbo de la situación emergente ante la Covid-19, es decir, mientras que otros países, potencias mundiales, unieron esfuerzos nacionales e internacionales para contener los contagios en dos o tres meses, resulta que en nuestro país se permitió la flexibilidad de movilidad, provocando que se extendiera la permanencia en casa y no la cuarentena debida que era más viable. Debimos realizar tres acciones importantes:

1) Desde el primer momento que se identificó el coronavirus como pandemia, el Estado Mexicano debió sumar esfuerzos para contener, de una u otra forma, la propagación del virus en nuestro país. Esto era implementar medidas estrictas de observación, vigilancia y atención en las entradas y salidas de mercancías y personas en las fronteras, puertos marítimos y aeropuertos.

2) Desde el momento que se identificó al primer paciente con Covid-19 se debió activar la alerta amarilla o naranja. No haciendo suposiciones, ya que por haberlas hecho no se actuó de manera inmediata y responsable, dejando que la propagación incrementara de forma extrema.

3) Se debió haber creado planes de contingencia en sus diferentes niveles de gobierno para contener la propagación. Esto debió ser de forma crítica y responsable, “sacrificando dos o tres meses” el aspecto económico y político, para que la salud pública estuviese estable. Pero sucedió todo lo contrario, la economía se ha sacrificado seis meses y se espera un años o dos más para su recuperación.

Desafortunadamente no se ha actuado frente a las circunstancias para activar la economía con el T-MEC y hacer favorable todos los acuerdos pactados. De qué nos sirve tener buenos acuerdos si no se pueden utilizar de la mejor manera.

Cambio de política económica

Desde enero se mantenían en reserva algunas de las reformas a diversas leyes en el Congreso de la Unión que no permitían justamente que el T-MEC entrara en vigor en nuestro país ¿Los legisladores habrán aprovechado la contingencia para avalar dichas reformas, y de qué forma? Recordemos que el propio Congreso (senadores y diputados) acordaron en continuar con la agenda legislativa sin debate presencial, y así, aprobar lo pendiente.

En la temática económica es necesario el fortalecimiento de la economía nacional a través del consumo interno y nacional. De esta manera, se logrará obtener en un plazo corto y mediano los resultados óptimos que permitan recuperar la economía de forma paulatina.

Con esta contingencia se debería crear nuevos mecanismos emergentes y de primer impacto para dos aspectos fundamentales:

1. Modernizar el comercio interior y fortalecer a las PyMES y;

2. Crear protocolos emergentes de diferentes rubros para contener posibles riesgos futuros.

La contingencia sanitaria nos lleva a tomar medidas estrictas que reoriente el rumbo hacia una nueva armonización entre especies que coexisten en el planeta. Estos mecanismos nos permitirán implementar y reinventar nuevos mercados mundiales para conectar nuestra vida como especie en conjunto con el mercado y la estabilidad del planeta en todos los sentidos.

Por otro lado, no ha habido cambios en la política económica para esta nueva etapa y cierre del año. Es urgente que se construyan planteamientos de transformación económica para fortalecer el mercado mexicano y proteger a quienes realmente mantienen la economía estable, la producción.

Reflexión

Tal parece que en estos momentos de emergencia sanitaria los que más se preocupan por el poder político y económico son algunas autoridades y el sector empresarial, pero el más perjudicado son todas aquellas personas que viven al día, los que se quedaron sin empleo a causa de patrones irresponsables o que simplemente no pudieron pagar más la nómina; aquellas personas que tienen pequeños negocios, las pequeñas y medianas empresas y; las que no tienen ninguna seguridad económica. Este sector poblacional, al igual que los niños y adultos mayores son los más vulnerables.

Como sociedad debemos emprender una estrategia junto con el Gobierno Federal y el sector empresarial para fortalecer la economía local; empezando de lo particular a lo general, es decir, consumiendo lo que se comercializa en nuestra localidad y, posteriormente, conforme se avance apoyar a la economía municipal, estatal y federal. Hay mucho trabajo por hacer.

El T-MEC es un acuerdo comercial que tiene proyección a mediano y largo plazo. Por lo que debemos comenzar con estrategias internas que incentiven el mercado interno y fortalecerlo con vínculos tejidos por redes tripartitas.

Pero también, el Gobierno Federal, Estatal y municipal deben comprender que está en sus manos tomar acciones que favorezcan a la población.

Las opiniones vertidas en la sección de Opinión son responsabilidad de quien las emite y no necesariamente reflejan el punto de vista de Gluc. 

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