Carta abierta a los rotarios de México

Twitter: @AlfiePingtajo

El pasado miércoles me invitaron a dar una ponencia al Club Rotario de Puebla A. C. Un Club que en mis años de adolescencia y primera juventud significó mucho para mí. Bajo el amparo de este Club y del Club Rotaract Puebla de los Ángeles; nació el Club Interact de los Ángeles, del cual fui miembro fundador y donde llegué a desempeñar los cargos de Secretario, Vicepresidente y Presidente. También llegué a ser Representante Distrital de los Clubes Interact. Preciso decir que los rotarios en los países se dividen u organizan por distrito; Puebla, Morelos, Guerrero y Tlaxcala conforman el Distrito 4185.

El mismo día que hablé ante el Club Rotario, murió Frank J. Devlyn, uno de los rotarios más importantes de México y uno de los mexicanos más destacados. Siempre preocupado por ayudar al otro. Hoy, me atrevo a reproducir unos fragmentos del texto compartido ante el Club Rotario Puebla A. C.: “Cultura y educación: ¿enfermos estables o en terapia intensiva?”

Llevamos confinados en casa al menos tres meses. Tres meses donde todo aquello que conocíamos como vida normal ha quedado detenido. A excepción del trabajo, si no existiera la música, la literatura, el cine y otras expresiones culturales pasando por el videojuego, estaríamos a nada del hartazgo.

Así pues, los productos culturales -vistos de forma banal- son una puerta de entretenimiento. Una balsa en medio del mar sin isla cercana; una Coca-Cola o cerveza bien helada en medio del desierto.

Hace años vivimos en un país donde la democracia nos otorgó la posibilidad de convertir en Presidente de México al candidato más cercano a nuestros ideales, y nos has dado las herramientas para ir peleando por la construcción de Instituciones fuertes, soberanas, ciudadanas y con cierta autonomía respecto al poder central.

Hoy, en medio de una pandemia se han implementado -desde la silla presidencial- una serie de medidas que han mermado el presupuesto a la Cultura, la Ciencia y la Educación con afán de tener más recursos para afrontar la pandemia y no endeudar al país, pero ¿a costa de qué?

Dichas medidas han eliminado los Fideicomisos o Mandatos como: FONCA, FOPROCINE y está en veremos la permanencia del FIDECINE.

Según el mismo FONCA, en estos 31 años con los más de 25 Programas (algunos vigentes, otros no) ha otorgado 22,826 apoyos, estímulos y becas a la creación artística en 96 disciplinas y especialidades, y ha apoyado a más de 19,000 creadores individuales y 3,825 grupos artísticos con distintas vocaciones y lenguajes. Todo eso se ha reflejado en: más de 125 mil obras en las siguientes disciplinas: Artes aplicadas, Artes visuales, Artes y Tradiciones Populares, Circo, Danza, Diseño, Arquitectura, Gestión y estudios culturales, Historia, Interdisciplina, Letras, Letras en lenguas indígenas, Medios audiovisuales, Música, Restauración y Teatro. Y según el actor Tenoch Huerta -en 2018- la industria cinematográfica creó 30, 357 empleos y la Industria del acero sólo generó 30, 049. Y comenta que existen 450 millones de hispanoparlantes en el mundo, lo que representa una gran puerta de mercado no solo para el cine sino para el libro, el Teatro y otras expresiones artísticas.

Se preguntarán: ¿y a mí rotario por qué me tendría que importar la situación de la Cultura? Y ¿en qué me afecta o no la existencia de menos foros teatrales, la desaparición de editoriales mexicanas independientes o la no generación de nuevos artistas? Aparentemente en nada y ampliamente en mucho.

En ciudades o Estados donde no existe playa, su mayor oportunidad para atraer turismo y con ello incentivar el movimiento/crecimiento de la economía local es el turismo cultural; dicho de otra forma: hay que atrapar al visitante por medio de las diversas expresiones culturales que son capaces de dar a conocer la historia de una ciudad, sus costumbres, sus secretos históricos, sus artistas más importantes, etc.

Estoy convencido que dentro de sus filas existe gente muy valiosa e inteligente que tiene amor por México. Hoy el país necesita de ustedes, pero de otra forma.

El asistencialismo –que para mí no es más que una especie de sometimiento, sobre todo si proviene del poder- ya lo hacen desde la silla presidencial. ¿Si en mejor de regalar cobijas, apuestan por generar opciones para impulsar la Cultura?

El futuro no es alentador si no viene acompañado de Cultura, Ciencia y Educación las únicas tres herramientas que conozco son capaces de construir un ciudadano libre de pensamiento, vicios y tendiente a la mejora de sus virtudes.

La mejor forma de seguir conservando un país libre, laico, soberano y donde todos los derechos estén garantizados es con ciudadanos cultos y educados. Hoy, amigos rotarios, México requiere que ayuden a construir mejores ciudadanos y la mejor forma es dándoles las herramientas para que aprendan a cuestionar, a valorar otras visiones, a sublimarse; y la mejor forma es el arte.