Silence y el sentido de la vida
Twitter: @viridianaeunice
"La palabra es el resumen del silencio, del silencio, que el resumen de todo".
-Roberto Juarroz
En medio de una cuarentena forzada en donde la calma y el silencio son obligados, el sentido de la vida, en una sociedad en donde eres por lo que haces o tienes, se cuestiona. Me pregunto: ¿Qué soy en medio del silencio y el encierro? Por ello mientras veía Silence de Scorsese no podía dejar de preguntarme el por qué el instinto de la fe en los hombres (homo sapiens). ¿Existe un sentido en la fe en medio de un racionalismo extremo y enfermo en donde la máxima filosófica cogito ergo sum (pienso, luego existo) respalda a la razón descartando el pensamiento y el sentir de una vida espiritual?
¿Por qué en medio de zagas de superhéroes que son personificaciones de los dioses y se muestran al público como algo verdadero y salvan al mundo de las catátrofes y fin del mundo, Scorsese decide hacer una restrospectiva en el tiempo, mirar atrás, al Siglo XVII en Japón y nos habla de Rodrigues (Andrew Garfield), un Jesuita que duda de la existencia Dios al ver y experimentar las torturas a las que son sometidos los creyentes cristiano?Ver esta publicación en Instagram
¿Por qué en un siglo (XXI) en donde la muerte de dios no sólo ha sido física sino también simbólica, se cuestiona su sentido en la vida de los hombres?Te podría interesar: Martin Scorsese pide no ver The Irishman en el celular Silence no sólo es una película que habla de la aventura en que dos jesuitas, Rodrigues y Garupe (Adam Driver), se sumergen al enterarse que su maestro Ferrerira (Liam Neeson), tras las torturas, ha abandonado su fe y vive ahora como uno más en Japón. También habla del conflicto del hombre ante el silencio eterno de Dios de su necesidad de escuchar una voz clara como prueba de su existencia. Rodrigues encarna a ese hombre lleno de dudas que no sabe qué hacer con esa fe que lo corroe y que a veces se le escapa. Mokichi (Shinya Tsukamoto) encarna la fe ciega que da sentido a la existencia sin importar que la muerte se encuentre al final de ésta.
Scorsese retrata en Silence la necesidad del ser humano por dar sentido a su vida y dotarla de significado a través de la fe.Estos aldeanos son capaces de morir y ser torturados por sus ideales y valores morales, lo que hace de ellos seres incorruptibles ante el dinero. Son incapaces de vender a los Padres a cambio de trescientas monedas de plata porque el dinero es incapaz de dar al espíritu la paz que otorga la fe. Concepto quizá difíciles de entender para quienes no pueden ver más allá de lo visible. Dios es una verdad que se transita a través de la oración y es en el silencio donde se manifiesta. Quizá por ello hoy que me encuentro encerrada en mi casa, en donde las personas postean actividades para no volverse locos en casa y no saben qué hacer en medio de la quietud, Silence me pareció tan poderosa. Porque Scorsese mira al pasado y muestra el poder de la fe cómo está le da un sentido de a su existencia.
Un aplauso a Scorsese quien en medio de la certidumbre de la mentira como única verdad, se permite dudar y cuestionar si en realidad dios ha muerto.Te podría interesar: Eminem duerme a Scorsese durante su presentación en los Oscar