Biden o Trump, ninguno de los dos quiere a AMLO

Desliz
Twitter: @GildoGarzaMx

Las elecciones presidenciales de 2020 se celebrarán este martes 3 de noviembre, y serán las quincuagésimo novenas elecciones presidenciales en Estados Unidos.

Los votantes eligen a los compromisarios que a su vez deberán escoger al nuevo presidente y vicepresidente a través del Colegio Electoral.

Los candidatos, el agrio, prepotente magnate multimillonario Donald John Trump y Joseph Robinette Biden Jr.

En la geopolítica mundial y en lo micro de la mexicana, es competencia y conveniencia que Donald Trump, sea erradicado del gobierno de la primera potencia a nivel mundial.

Su populismo ha venido a fortalecer ampliamente a figuras retrógradas y comunistas a nivel Latinoamérica, como el vecino del traspatio Andrés Manuel López Obrador, quien acusan, se encuentra influyendo con el voto latinoamericano para favorecer al magnate.

Francamente, por el bien del mundo y de México, se espera la derrota de Trump, quien ha considerado que los mexicanos somos unos inútiles, violadores y asesinos.

Trump se ha dedicado los últimos cuatro años a insultar y humillar a los mexicanos, impulsando la construcción del muro fronterizo, deportando a miles de migrantes y cometiendo crímenes de odio por separar a los niños de sus padres y encerrarlos en cárceles.

Las relaciones entre México y Estados Unidos han dejado muy hondas cicatrices, pero al mismo tiempo presentan grandes oportunidades para el futuro. La detención de Salvador Cienfuegos exhibe una ruptura en los acuerdos políticos internos y de estrategias de seguridad con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, así que de todas formas mis queridos y caros lectores la contrariedad de que gane o pierda Trump, a López no le favorece.

Sin contar los mensajes entre líneas, por las operaciones fallidas de López, para detener a Ovidio Guzmán y otros objetivos primordiales para Estados Unidos y su control de tráfico de drogas.

El único acierto es que México logró posicionarse como el primer socio de EU como resultado de la reciente implementación del tratado comercial entre los países de Norteamérica (T-MEC) y, sobre todo, gracias a la guerra comercial que Estados Unidos mantiene con China.

En una consulta realizada a algunas fuentes de la DEA en Texas, pudimos captar que de ganar Biden, piensan que aprovecharía su extensa experiencia política para reconducir la relación con México en materia de seguridad y fomentar una mayor cooperación.

Es decir, que así como México tiene que confrontar al crimen organizado y reducir los grupos de estupefacientes a través de la frontera, EU tiene un papel que jugar en detener el trasiego de armas y de dinero en efectivo hacia México. Y esto Biden lo entiende muy bien.

Con Donald Trump, sería más de lo mismo, demagogia y populismo sin soluciones.

Según los representantes del partido demócrata en México, Biden, despega con un 12 por ciento arriba en todas las encuestas; seis estados están aún en juego, 3 al norte del país, Carolina del Norte, Florida y Arizona son las más cercanas, mientras Pensilvania, Wisconsin y Michigan están muy alejadas, cuestión que no garantiza el triunfo, sin embargo el revés del electorado siempre puede darse en el último minuto, conforme a los discursos y propuestas que llevan hasta el último momento los candidatos.

¡Biden Friends!

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El día de ayer estuvo la candidata demócrata Kamala Harris en MCAllen Texas donde tuvo una buena apreciación y cobijo de parte del electorado; la complejidad de los gustos políticos a elegido durante los últimos 20 años solamente candidatos republicanos, hoy podría hacer la diferencia.

Para el Gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, el triunfo de Biden, potenciaría la relación entre los demócratas del gobierno americano con la derecha humanista y cristiana de Acción Nacional, situación que causa encono entre la ola progresista radical del movimiento de Regeneración Nacional. Ciertamente a MORENA no le conviene que un humanista llegue a la Casa Blanca, y menos que Senadores y Congresistas texanos apoyan al Gobierno de García Cabeza de Vaca.

Inclusive con los destinos y el posicionamiento del líder azul, a quien lo ven ya proyectado como el posible sucesor de Marko Cortes; sus relaciones con el partido Demócrata y Biden podrían ocasionar una amalgama anti populismo comunista como el que se proyecta desde la cúpula bolivariana de MORENA a nivel nacional.

Económicamente, también se favorece con la explotación de los polos en energía renovable y la implementación del tratado comercial entre los países de Norteamérica (T-MEC), ya que Tamaulipas, tiene una de las puertas más grandes a nivel latinoamericano hacia el vecino país.

Súmese la proyección de la Alianza federalista; nuevamente Francisco, figuraría como el interlocutor con el partido demócrata, y la Casa Blanca, desde la puerta norte de México.

¿Noroña, tendrá algún mensaje para el Gobernador tamaulipeco nuevamente?

Hay que tener cuidado con el odio irracional y la campaña que han traído los bolivarianos contra el gobernador de Tamaulipas; recordemos que el PRI lo criminalizó durante muchos años y llegó a la silla del gobierno tamaulipeco, y aunque quieran buscarle negativos; existen más positivos.

Prueba de ello es que mientras morena a nivel nacional debe más de 390 mil millones de pesos a la Hacienda Pública Federal, según el informe de la Auditoría superior de la federación.

A Tamaulipas, solamente le falta por aclarar 13 millones de pesos.

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