Erradicar el outsourcing

Twitter: @JOHN_OLIVERA

La reforma para regular el outsourcing es más que una iniciativa para eliminar todo tipo de rasgos de esta sanguijuela laboral, esquema jurídico que permitió durante un sexenio vulnerar los derechos laborales y sindicales de millones de mexicanos. Al contratar este servicio los trabajadores perdían total y absolutamente todos elementos que conformaron la esencia y el espíritu del artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la Revolución Mexicana y el progreso nacional.

¿Por qué se debe erradicar este concepto y no modificarlo?

 Las circunstancias son distintas. En un sistema laboral de derechos ganados y, por otra parte, un sistema jurídico como el nuestro, en donde una de las características del derecho es la progresividad, no se puede permitir el estancamiento con la reforma laboral del 30 de noviembre de 2012, donde el expresidente Felipe Calderón dejó como su última pésima acción previo a su salida de los pinos.

Considerar una modificación significaría continuar con las prácticas contrarias a la defensa de los derechos laborales, ya que no existe la posibilidad de que el trabajador tenga un progreso sustantivo en su trayectoria ni el mínimo sentido de seguridad y estabilidad laboral.

La erradicación sería la única opción y mejor decisión del Gobierno Federal. Se obtendría como resultado un avance fundamental en materia laboral y justicia social. Los jóvenes podrían tener mayor seguridad en el empleo y mejores condiciones trabajo. Analizando la balanza, esta erradicación se ajustaría a los planteamientos del T-MEC que proponen mejores condiciones laborales en los diferentes sectores que se involucran en el tratado. Por lo que su cumplimiento deberá ser necesario.   

¿Qué se define en la propuesta del Presidente López Obrador?

De acuerdo con la revista Forbes México, con su nota titulada La reforma de AMLO contra el outsourcing en 8 puntos. Definen dentro de estos 8 puntos la prohibición de la subcontratación de personal, se permite la prestación de servicios especializados, la figura jurídica de responsables solidarios, registro en el padrón público de servicios especializados, sanciones administrativas y económicas, la tipificación del outsourcing como delito de defraudación fiscal y la vacatio legis hasta el 1 de enero de 2021.

Sin duda alguna, en esta forma sintetizada se puede observar que se cumple con la mayoría de los elementos para la erradicación del outsourcing. Pero no debemos confiarnos, ya que muchas empresas utilizarán distintos mecanismos para sujetarse a la ley y así continuar con el atropello de los derechos laborales.

El Gobierno Federal deberá implementar centros de vigilancia y recepción de denuncias ante estas circunstancias. Por otro lado, prever que estas empresas comenzarán a realizar despidos masivos por la falta de conveniencia que implica en el negocio. No es lo mismo pagar un servicio sin prestaciones reales a contratar formalmente a trabajadores con las prestaciones absolutas de la ley.

Reflexión

Se debe considerar todos los elementos que puedan beneficiar y perjudicar a los a trabajadores. Por otro lado, buscar la manera de incentivar a las empresas para equilibrar la balanza entre los factores de la producción. De tal manera de que todos puedan hacer sinergia para impulsar la economía nacional de manera jerárquica en los diferentes niveles de gobierno.

Una de las mayores preocupaciones es el desempleo. Por lo que considero fundamental que se protejan a los trabajadores en cualquier sentido. La flexibilidad fiscal podría ser una solución en esta transición jurídica, siempre y cuando las empresas se flexibilicen con los trabajadores, no despidan a los trabajadores que se encuentran en este esquema laboral. De esta manera se puede realizar un trabajo en conjunto por el beneficio de los trabajadores y la economía nacional.

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