Por Manuel Padrón
Twitter: @Manuel_JafetPV
Durante los primeros días de este 2020, una vez más, fuimos testigos de los efectos del cambio climático. La costa sureste del continente australiano se encuentra en llamas.
En el Estado de Nueva Gales del Sur se han quemado más de cuatro millones de hectáreas. Los incendios han cobrado la vida de cerca de 500 millones de mamíferos, reptiles y aves del país. Se contabilizan más de mil edificios destruidos y 17 personas muertas desde octubre.
La temporada 2019–2020 de incendios forestales ya es catalogada como una de las peores en la historia de Australia, y el verano apenas había comenzado.
El Cambio Climático está empeorando los incendios, debido al aumento de la temperatura y sequías más largas. La plataforma EarthTime, utilizando conjuntos de datos de imágenes capturadas por la NASA, realizó una animación con el histórico de los incendios (en Australia) de 2000 a 2019.
El calentamiento global ha hecho que la temporada de incendios sea más peligrosa.
La plataforma EarthTime y el @WEF hicieron un histórico de los incendios en Australia (2000-2019). ? https://t.co/ow1LVUjjQE pic.twitter.com/Af3cPgzsE7
— Manuel Padrón (@Manuel_JafetPV) 15 de enero de 2020
La animación muestra las anomalías y aumento de los incendios en los últimos 19 años. Se calcula que la superficie afectada equivale a 10 millones de hectáreas.
Cambio Climático y sus efectos en México
El Cambio Climático tiene consecuencias que pueden ser percibidas en la intensidad y frecuencia de fenómenos naturales. Nuestro país se ha caracterizado por ser vulnerable a diversos fenómenos hidro-meteorológicos y geofísicos, debido a su ubicación geográfica, principalmente la formación de ciclones tropicales en la costa del Pacífico y del Golfo de México, además de los que se asocian con la inestabilidad de los suelos.
México se colocó entre los primeros lugares, de una lista de 40 países, derivado a las pérdidas económicas por desastres naturales ocurridos entre los años noventa y los dos mil. Lo anterior de acuerdo con datos del Global Assessment Report (GAR) de la Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres Naturales de las Naciones Unidas (EIRD-ONU). Datos del mismo reporte señalan que nuestro país ha sumado casi 50,000 millones de USD por daños ocasionados por desastres naturales en los últimos 30 años. El promedio anual es cercano a los 2,000 millones de USD.
De acuerdo con datos del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) del año 2000 a 2019, se han emitido 2,218 declaratorias de riesgo.
El Estado que encabeza la lista es Veracruz con 345, seguido de 0axaca (174) y Chiapas (153). Entre los tipos de declarativo que más se han emitido están las Heladas (Contingencia Climatológica) con 149, Lluvias (Desastre) con 373 Lluvias (Emergencia) con 490. Estas últimas teniendo como diferencia el momento en el desarrollo del fenómeno climatológico.
¿Cuáles son las alternativas?
Es positivo sumarse a campañas e iniciativas para la reducción o disminución en el uso de productos como el plástico. Sin embargo, es necesario tomar acciones de mayor alcance.
Frenar impactos más graves del cambio climático, como las inundaciones costeras, los científicos han estimado una cantidad tope de gases de efecto invernadero a liberar en la atmósfera. Para mantener el incremento de temperatura global en 1.5°C, el Presupuesto de Carbono del mundo es entre 420 y 580 GtCO2.
Superada esa meta, inevitablemente habríamos de superar el aumento de temperatura promedio de 1.5?–2?C.
Para lograrlo es necesaria la articulación y la organización colectiva. Las metas deben de ser dos:
- Transitar a un cultura de prevención y gestión de riesgos, ante fenómenos naturales perturbadores y
- Contribuir a la mitigación de emisiones globales.
“El futuro de las personas del mundo, el futuro de nuestro planeta, está en sus manos. No podemos darnos el lujo de la indecisión, las medidas a medias o los enfoques graduales. Nuestra meta debe ser una transformación” – Ban Ki-moon.