España: ejemplo de la necedad de caer en la misma piedra

jueves, 21 de noviembre de 2019 · 02:11
Twitter: @manu_cota Los humanos somos tendentes a caer una y otra vez en los mismo errores, es una realidad histórica que no aprendemos ni en cabeza ajena y que después de poco tiempo lo malo se olvida con facilidad y es que al distanciarnos del pasado se va perdiendo la realidad y la perspectiva de los contextos. En México tenemos ejemplos de esa patológica necesidad humana de caer y caer en los mismo errores, a nivel nacional después de ochenta y muchos años de gobierno del PRI con los innumerables casos de corrupción las personas volvían a la carga en dar su apoyo o incluso a nivel local en la Ciudad de México tras veinte años de gobiernos de partidos de izquierda con la notoria falla de gestión e inseguridad también aquí volvemos a dar nuestra confianza en las urnas a los mismo que no tuvieron soluciones a los problemas reales. El caso más reciente y que al autor de estas palabras le sorprende más es el de España, a poco más de 10 días de las Elecciones Generales (3as casi consecutivas por la imposibilidad de gobernar) sigo intentando entender los insights que llevaron al 28% de la población a  votar por el PSOE y es que este partido político de más de 100 años tiene en su historia antigua casos de asesinatos de rivales o fueron en parte culpables del inicio de la Guerra Civil Española, pero nuevamente se entiende que un pasado tan antiguo se olvide o se transgiverse. Lo realmente sorprendente es la historia actual de ese partido hace poco más de 10 años con José Luis Rodríguez Zapatero a la cabeza llevaron a España a la peor crisis económica de su historia, con Felipe González hicieron terrorismo de estado y aumentaron la desigualdad y los desempleados y lo que hace incomprensible la decisión de ese 28% de españoles que votaron es la actual gestión que en fechas recientes se descubrió el mayor caso de corrupción de Europa orquestado por este partido. Algo tendremos los iberoamericanos que nos cuesta aprender del pasado y escarmentar en cabeza ajena, amén de nuestros amigos de Venezuela, Chile o Argentina que no importan lo que los actuales y pasados gobernantes hagan seguimos sin apostar por un cambio sólido y potente de rumbo.

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