América Latina, la factura del 2018

31 periodistas asesinados en América Latina, 13 de ellos en México durante 2018, es parte del saldo de crispación que dominó la región.

El acoso contra los medios exacerbó el clima de impunidad que mantiene a la sociedad civil en la indefensión y, en algunos casos, ante un panorama sombrío para el año que comienza.

Es el caso Venezuela que cierra 2018 como el país más violento en Latinoamérica con un tercio de los homicidios cometidos por fuerzas policiales, según el Observatorio Venezolano de Violencia. En ese país, la oposición también se paga con cárcel: 278 presos políticos, según un conteo del Foro Penal Venezolano.

Y los que pueden, se van: 3 millones de ciudadanos huyendo de la crisis, según la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ANCUR) y provocando otra de seguridad y hacinamiento en Colombia, Brasil, Perú y Ecuador.

Fuera de todo pronóstico (¿o no?) este 10 de enero Nicolás Maduro inicia un nuevo mandato en Venezuela.

2018 vio surgir otra crisis: Nicaragua. Tras once años de un Gobierno consecutivo, en abril los nicaragüenses dijeron “basta”. La chispa fue el intento de reformar la seguridad social.

Daniel Ortega,  uno de los últimos revolucionarios vivos en la región quien a finales de 1970 enarboló los valores sandinistas que devolvieron a Nicaragua a la vía democrática, tomó el camino del autoritarismo que, según cifras del Gobierno,  dejó un saldo de 199 muertos.

Pero existen otros números: entre 325 y 545 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Organismos no gubernamentales reportan además 674 presos políticos a lo que se suma la censura a medios de comunicación: en el último mes seis periodistas han sido acusados de conspiración. Dos de ellos están detenidos. [caption id="attachment_35214" align="aligncenter" width="462"] Fuente: reuters.com[/caption]

Otra crisis pero con tintes económicos es la de Argentina. La “papa caliente” que el presidente Mauricio Macri heredó del Kirchnerismo estalló. Este año el país vio su economía reducirse 2.6 por ciento y su moneda devaluarse hasta alcanzar los 39 pesos por dólar.

El rescate de 57 mil millones de dólares que el gobierno pidió al Fondo Monetario Internacional (FMI) -el más grande en la historia del país- apretó los bolsillos de los argentinos que se volcaron a las calles a protestar.

La débil perspectiva económica, los escándalos de corrupción y la inestabilidad política nublan el 2019 para Argentina, año en que se verá si las urnas cobran factura al dirigente deportivo y empresario que se aventuró a la política. [caption id="attachment_35216" align="aligncenter" width="495"] Fuente: reuters.com[/caption]

En el vecino de Argentina, Brasil el 2018 dio el martillazo final a lo que parecía intocable: el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva y, de paso, lo impensable: el ascenso de un líder ultraderechista Jair Bolsonaro, irreverente y políticamente incorrecto, algo así como Trump o Duterte pero latinoamericano.

Con Lula encarcelado Bolsonaro vio crecer su popularidad. Irónicamente la estocada final hacia el Partido de los Trabajadores fue la que recibió Bolsonaro con un cuchillo en el abdomen durante un acto de campaña. A partir de ahí su ascenso se consolidó hasta alcanzar 56 por ciento de las preferencias de los brasileños en una elección definida en segunda vuelta.

Este 1 de enero Bolsonaro llegó al poder bajo un despliegue de seguridad nunca antes visto en una toma de protesta en Brasil, con invitados inéditos como Israel y con invitados tradicionales como Venezuela y Cuba “desinvitados” cerrando así el capítulo de izquierda que se va con 5 por ciento de aprobación tras 16 años en el poder. [caption id="attachment_35217" align="aligncenter" width="499"] Fuente: reuters.com[/caption]