Twitter: @LuzJaimes
Hoy vuelo sobre ti. Una niebla irritante que pinta todo de gris estuvo a punto de correrme. No me fui. No lo hice porque al pasar las nubes te encontré. Estás malditamente llena de color. Pensé que tanta gente al mezclarse producía todos esos tonos. Tono tristeza, tono inocencia, tono rencor, tono hambre, tono pasión y cansancio. No pude definirlo.
Hoy es domingo y he decidido hacer algo por mi; descansar. No lo logré. La danza, la vida pesada que cargan muchos acá. La espera, un semáforo en rojo que nadie quiere termine porque no se sabe qué va a pasar después. El olor de la comida que comemos y de la que no podemos comer.
Los lugares a los que entramos y a los que no podemos entrar.
Mucho calor, mucha humedad y mucha agua. Me pregunté quiénes son ellos. Luego pensé en los otros que no hacen nada y en los que hacen por los que no pueden hacer. Pensé en los Dioses y sus flores.
Me dijeron que ahí abajo hay un lago. Es como si fuera tu sangre y la de ellos. Corre dentro, palpita, se detiene, se hace coágulos. Hasta que es herida la tierra reluce color gris, a veces verde; otras negro. Siempre rojo color guerra. Dicen que es la mezcla de los muertos que viven ahí abajo. También son muchos y ladran los perros.