Twitter: @JOHN_OLIVERA
Un servidor ha sido crítico de la política nacional en diferentes ámbitos y materias, por lo cual, he tratado de dar mi punto de vista lo más objetivo posible, ya que es necesario y fundamental que cualquier columnista crítico no pierda los elementos suficientes ni el sentido al escribir sobre un tema en específico, mucho menos cuando se trate de política. La pluralidad en las ideas converge en la construcción de los pilares que servirán como soporte para equilibrar las fuerzas de la sociedad.
En este sentido, considero relevante escribir sobre un tema fundamental que nos aqueja a todos los mexicanos, “La nueva guerra comercial Estados Unidos vs México”. Aunque nuestro país no fue quien inició esta absurda acción comercial, considero necesario que el Gobierno federal tome acciones precisas para frenar o contrarrestar las decisiones del presidente Donald Trump. Sus palabras han más que ofensivas, tratando de dar notar pública e internacionalmente que México no es capaz de detener por orden o mandamiento estadounidense a las caravanas migrantes que cruzan las frontes (sur-norte y norte). El problema va más allá de capacidades de control migratorio, es decir, son un conjunto de factores internos y externos que generan la movilidad de masas de grupos migrantes.
Mexico is sending a big delegation to talk about the Border. Problem is, they’ve been “talking” for 25 years. We want action, not talk. They could solve the Border Crisis in one day if they so desired. Otherwise, our companies and jobs are coming back to the USA!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 2, 2019
Cabe señalar que, a finales de 2018 se comenzó a realizar movilizaciones de migrantes en grandes cantidades, irrumpiendo en nuestra frontera sur con Guatemala no importando la seguridad de los mexicanos ni de ellos mismos. Esto se podría considerar una invasión al territorio mexicano. Sin embargo, en ese momento el gobierno federal no tomó las medidas que correspondían sino todo lo contrario, fueron acciones pacíficas y demasiado accesibles. Fue una decisión correcta al no ejercer violencia, pero demasiado flexible para no utilizar la fuerza pública que diera mayor control y certeza de seguridad para los mexicanos.
Unidos por una causa
Una de las razones por las cuales me enorgullece el ser mexicano es que ante las circunstancias más difíciles, internas y/o externas, somos solidarios; dejamos a un lado las diferencias y banalidades, las razones más absurdas que nos dividen como sociedad para unirnos como una sola nación en pro de la dignidad y bienestar de nuestro país.
Hoy en día la dignidad de México no será suprimida ni mucho menos sometida a caprichos de Donald Trump, quien lejos de ser un líder de progreso, se encuadra a un perfil hostil de carácter nacionalista, pero racista. Incumpliendo con acuerdos y tratados internacionales de los que Estados Unidos ha sido protagonista y un importante participante.
Mexico is sending a big delegation to talk about the Border. Problem is, they’ve been “talking” for 25 years. We want action, not talk. They could solve the Border Crisis in one day if they so desired. Otherwise, our companies and jobs are coming back to the USA!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 2, 2019
Ante estas circunstancias, así como en 2018 con el presidente Enrique Peña Nieto, debemos unirnos, solidarizarnos y fraternizarnos con el Presidente Andrés Manuel López Obrador. Sin importar colores partidarios, ideologías políticas o alguna variante que signifique replegarse, la congruencia entre los mexicanos está en la unión de la fuerza como Estado nación en apoyo a nuestro representante, el presidente de los Estados Unidos Mexicanos.
Reflexión
A pesar de las amenazas que Donald Trump ha lanzado en contra del Estado mexicano, no significa que las lleve a su cumplimiento como tal, ya que no es conveniente para ambos países, y lo que provocaría sería grandes problemas económicos.
En el mandato de Trump hemos visto muchas palabras y acciones incorrectas que han puesto a medio mundo, si no es que al mundo entero, en alerta. De llevarse a cabo el incremento porcentual mensual del 5%, México debe tomar precauciones, proyectar nuevos planes estratégicos y fijar posturas sólidas sin retrocesos.