La muerte de Armando Vega Gil abre discusión en torno al #MeToo mexicano
La muerte del bajista Armando Vega Gil de la banda Botellita de Jerez, en medio de una acusación en su contra dentro del movimiento #MeTooMúsicosMexicanos que se originó hace una semana, ha causado una serie de reacciones en redes sociales. Por la madrugada de este día, el músico había hecho pública en su cuenta de Twitter en la que anunciaba su suicidio: "No se culpe a nadie de mi muerte: es un suicidio, una decisión voluntaria", escribió.
Más tarde, sin asegurar que se trató de un suicidio, su banda confirmó su fallecimiento. "Nos encontramos procesando esta noticia", detallaron. Al igual que las decenas de usuarios que han expresado su opinión, e incluso, su preocupación, al explicar que tras este hecho no debería culparse a ninguna mujer ni descalificar el movimiento Me Too en México que busca visibilizar la violencia contra las mujeres. "Me preocupa muchísimo que, otra vez, la culpa termine siendo de las mujeres (en el imaginario público) y la discusión gire solamente al rededor de las fallas del #MeToo", escribió la periodista Yuriria Sierra. Mientras otros usuario, como el director de cine Manolo Caro, han señalado la "irresponsabilidad" del movimiento. Hubo quien invitó a guardar silencio.
Por otro lado, la cuenta de #MeTooMúsicosMexicanos que recopilaba los casos de abusos cometido por músicos, entre ellos el que denunciaba a Vega Gil, fue dada de baja en Twitter.