Este lunes, Google hizo un homenaje al juego de “la lotería” en su doodle, es decir, el letrero interactivo del buscador. Perla Campos, líder global de Marketing de la empresa, sería la responsable de la ofrenda pues sus recuerdos en México la inspirarían a crear el anuncio.
Poco sabemos, pero la historia de la lotería se originó en Europa pues el juego fue traído por los españoles a México en la época colonial y estaba reservado solamente para la clase alta. No obstante, con el paso del tiempo, este llegaría a manos de los pueblerinos convirtiéndose en un juego tradicional.
De igual modo, el juego en aquella época usaba coplas (es decir, poemas cortos en rima que se usan para hacer referencia a la cultura popular mexicana), con lo cual se educaba a la gente pues la mayoría de la población (la cual era indios) no sabía leer ni escribir y por medio de los cánticos y las imágenes en la baraja se les educaba.
Gracias a esto, obtuvimos como resultado la famosa imagen “del gritón”, quien sería el tradicional cantor el cual va “leyendo” las cartas conforme van pasando en el juego.
Por otro lado, en lo que respecta a su fama no solo se debe a que tiene más de un siglo de jugarse, (como hemos leído en párrafos anteriores), sino también se debe al famoso empresario Clemente Jacques, el cual crearía en 1887 las ilustraciones populares que conocemos hoy en día para plasmarlas en sus ya famosas “latas de chile”.
Como resultado, varios artistas más intentaron recrear las imágenes del tradicional juego mexicano puesto en los envases de “El Gallo Don Clemente” hasta nuestros días.
Además, el juego se sigue reproduciendo en México y en Estados Unidos sacando miles de copias año con año.
Como datos curiosos tenemos que, aunque a la lotería se le compara con el bingo, esta en su esencia es totalmente diferente ya que posee su propia al plasmar personajes emblemáticos además arquetipos de nuestro país:
La chalupa, la bandera, el catrín, el borracho serían algunos de estos.
Por otro lado, tenemos que el tradicional juego mexicano no es de dominio público, (aunque así lo parezca), pues cuenta con 106 años de derechos de autor por Entretenimiento Gallos.
Con información de El Universal e Infobae.