El recuento del (d)año…

Por Samuel Ocampo

Twitter: @SamOcampoB?

Justo a unas horas de que termine este 2018, hagamos una especie de acto de contrición y revisemos cómo nos fue y cómo les fue a otros que quisieron cambiar los foros por un hueso político en este movido año.

A quien le fue bien es a la cantante y promotora cultural Susana Harp, quien llegó al Senado por Morena. Obtuvo 894 mil 983 votos, contra 360 mil 386 de su más cercano adversario, Raúl Bolaños Cacho Cue, de la coalición PRI-PV-PANAL.

Otro que le fue bien –pero que ahora le está yendo todo lo contrario— es Sergio Mayer. Del ex Garibaldi ya hemos escrito en otras ocasiones en otro espacio. Ahora como presidente de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados FE-DE-RAL, a veces confunde la gimnasia con la magnesia: es decir, un Estado con un municipio. ¿Verdad que no todo es cantar Banana sweet…?

Muy mal le fue a Leticia Calderón, quien quiso ser senadora de la República por el Partido Verde. Se quedó con las ganas de llegar a la Cámara alta. Ni modo se quedará con la cámara, pero de algún foro de Televisa San Ángel.

Peor le fue a Ruth Gabriela Goldschmied Guasch, más conocida en las telenovelas como Gabriela Goldsmith, la actriz que también quiso cambiar los foros de televisión por una curul en la Cámara de Diputados.  Ella, como candidata del Partido Nueva Alianza obtuvo 31 mil 138 votos contra 69 mil 996 de su contrincante María de los Ángeles Huerta del Río, de Morena. Una pequeñísima diferencia de casi 27 puntos porcentuales. Bah, casi nada.

Ausencio Cruz de plano no vio su reaparición en los reflectores. También perdió en las urnas el pasado 1 de julio cuando quiso ser diputado federal por el distrito 15 por Morena. Láaaaastima Margarito, se quedó a 5 puntos porcentuales de ganarle a su más cercano adversario. 

Ni qué decir de Rocío Banquells, quien quiso ser candidata del PRD al Congreso de la Ciudad de México. Se quedó con las ganas de encabezar si quiera una comisión capitalina.

Claro, no podemos dejar de lado a Daniela Castro, familiar política del ex presidente Gustavo Díaz Ordaz, a quien la acusaron de presuntamente intentar robarse unos trapitos de una tienda nice en Estados Unidos. Ella, afortunadamente fue exonerada y ahora contraatacará con una demandotototota

Mención aparte merece el caso de un candidato del Partido Verde en la Ciudad de México.

Qué diferente hubiera el futuro de Alfredo Adame si justamente antes de la campaña electoral del Partido Verde como alcalde de Tlalpan, o durante ella, se hubieran filtrado sus fotos desnudo.

 Digo, ¿qué no la población se queja de que quiere conocer a los políticos al desnudo?

La ganona hasta hubiera sido su ex, a quien le deben dar las gracias de las fotos tuiteadas. 

Caray, hasta hubiera sido su lema de campaña. “Adame, como quiere verlo”.

Así un pequeño recuento del (d)año…

¡Que en el 2019, no nos deje de sorprender el espectáculo de la política!

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