Muere Tan, el último rinoceronte de Sumatra macho en Malasia

lunes, 27 de mayo de 2019 · 16:08

El rinoceronte Tam murió, y consigo, se consume también la esperanza por salvar a una especie en peligro de extinción.

Se calcula que actualmente unos 80 rinocerontes de Sumatra viven aislados entre la isla de Sumatra y la isla de Borneo, en Indonesia. Pero Katam, mejor conocido como Tam, era el último rinoceronte macho de esta especie que habitaba en Malasia junto con Iman, la única rinoceronte hembra que ahora sobrevive en este país, y con quien fallidamente intentaron que se reprodujera. "La muerte de Tam pone de relieve lo importantes que son los esfuerzos colaborativos que impulsan el proyecto Sumatran Rhino Rescue", explicó a National Geographic Margaret Kinnaird, líder de prácticas de fauna silvestre en WWF International.

Desde 2018, Sumatran Rhino Rescue, que es una colaboración sin precedente alguno entre organizaciones de conservación animal, ha intentado rescatar la mayor cantidad posible rinocerontes de Sumatra, al suponer que el aislamiento de esta especie representa "la mayor amenaza" para su existencia, según expertos. Desde entonces, su objetivo: es hacer bebés rinocerontes.

Tan, el último rinoceronte macho de Sumatra en Malasia. Twitter: @RhinosIRF.

Pero Tam, que fue rescatado en 2008, nunca pudo reproducirse. “Recuerdo muy bien cuando capturaron a Tam y las grandes esperanzas de todos eran que él podría ser el miembro fundador de un exitoso programa de cría en cautividad en Sabah, y unirse a los esfuerzos internacionales de Estados Unidos e Indonesia”, dijo Susie Ellis, directora ejecutiva de la International Rhino Foundation, en un comunicado.

"Lamentablemente, esas esperanzas se vieron frustradas en repetidas ocasiones durante la próxima década por una serie de incidentes, algunos sociopolíticos, otros biológicos y otros simplemente de mala suerte”.

Sin embargo, de acuerdo NatGeo, no todo son malas noticias. A finales del año pasado, la captura de una rinoceronte hembra llamada Pahu, que fue trasladada a un centro de cría en Kelian, representó una nueva esperanza. "Debemos seguir centrándonos en los 80 rinocerontes de Sumatra restantes, emplear una combinación de protección intensiva y cría en cautividad, y trabajar con los lugareños para infundir orgullo por que el rinoceronte forme parte de su patrimonio biológico», afirma Ellis. "No podemos permitirnos perder esta batalla",

Tam tenía alrededor de 30 años hasta el día de su muerte.