Autoridades de Londres decidieron este lunes, no renovar la licencia de la plataforma de alquiler de vehículos con conductor Uber tras descubrir fallos que permiten a los chóferes falsificar su identidad poniendo en peligro la identidad de los pasajeros.
La empresa que actualmente tiene 45 mil conductores y casi 4 millones en la capitán británica anunció inmediatamente que recurrirá la decisión y seguirá funcionando como hasta ahora a la espera de un fallo definitivo.
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Según la opinión de Transport for London, el gigante californiano “no es apto para tener licencia”.
Esto debido a que el organismo afirmó haber “identificado un patrón de fallos por parte de la compañía que incluye varias infracciones, entre las que figuran un elevado número de “conductores no autorizados” inscritos en la plataforma pues aprovechan “las vulnerabilidades de la aplicación para transportar a miles de pasajeros”.
Este problema se da gracias a que la aplicación permite a decenas que los falsos introduzcan sus fotografías en perfiles de otros chóferes. De acuerdo con el organismo, esto ocurrió al menos en 14 mil trayectos.
Por si fuera poco, otro fallo de Uber es que a los conductores expulsados o suspendidos se les permite crear una cuenta nueva, por lo cual “pueden seguir trabajando como si nada hubiera ocurrido”.