La ex novia de Connor Betts, el tirador de Ohio, Adelia Johnson ha revelado que Connor ya tenía mucho tiempo de no estar mentalmente estable y declaró que no le sorprendió cuando escuchó que Connor había matado a nueve personas, y herido a 27 más.
Según Johnson, Betts llevaba mucho tiempo peleando contra una enfermedad mental, y mencionó que el tiroteo “no tuvo nada que ver con una cuestión de raza, y tampoco de religión. Fue un hombre que sufría y que no recibió la ayuda que necesitaba”.

De acuerdo con la ex pareja, ella lo conoció en el colegio y se sintió unida a él porque ambos sufrían de enfermedades mentales, Connor incluso le confesó que sufría de trastorno bipolar y trastorno obsesivo compulsivo.
Por otro lado, Adelia recordó que Betts siempre había mostrado señales que, de cierta manera, predecían el tiroteo del pasado domingo; “que la policía le disparara fue exactamente lo que él quería”, declaró Johnson.