No todos los famosos nacieron en cuna de oro, algunos saben lo que es tener carencias y contar cada moneda. Ese es el caso de Florinda Meza, la actriz contó que en el pasado usaba cajas y restos que encontraba La Merced para adornar su casa, esa en donde vivió antes de la fama.
Florinda Meza concedió una entrevista con Adela Micha, la cual se publicó en las redes oficiales de La Saga este 10 de septiembre. Allí mencionó las polémicas en las que se ha envuelto, el tema de la serie Chespirito: sin querer queriendo y cómo era su vida antes de ser actriz.
Florinda Meza cuenta su difícil pasado
En la misma conversación, la actriz de 76 años relató sus desafíos monetarios antes de consagrarse dentro del medio mexicano. Dijo que iba a La Merced -una zona de la CDMX conocida por sus bajos costos- a buscar cajas de vino y frutas especiales para armar sus muebles.
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La actriz que dio vida a “Doña Florinda” en El Chavo del 8 explicó que usaba esas cajas para crear libreros o salas, mientras que los huacales que encontraba los utilizaba como bancos. Y eso no es todo, también iba a la calle Artículo 123 para conseguir tubos y focos con los que diseñaba sus lámparas.
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Pero eso no fue todo lo que dijo en la entrevista, Florinda Meza se definió como autosuficiente desde sus primeros pasos en la actuación. Cuando nadie la conocía, ella estudiaba y trabajaba, proveyendo así todos sus gastos, sin ayuda de nadie.
Explicó que aunque era pareja de uno de los comediantes más exitosos de México, siempre vivieron en casas o barrios de la clase media. Asimismo contó que nunca le pidió dinero para gastos al propio Roberto Gómez Bolaños.
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La historia de Florinda Meza es un recordatorio de que el éxito no siempre llega fácil. Tuvo humildes inicios, tanto que creaba muebles con cajas y huacales encontrados en La Merced. Sí, muchos podrán cuestionarla, pero en cuestiones laborales sí que supo salir adelante sin ayuda de nadie.