¡Maldita lisiada!

¡Maldita lisiada! 4 momentos icónicos de Soraya Montenegro

No hay villana de telenovela más recordada que la malvada Soraya Montenegro, dispuesta a todo con tal lo lograr sus objetivos, estos son sus momentos más icónicos.
miércoles, 11 de mayo de 2022 · 18:40

Soraya Montenegro, su nombre es sinónimo de todo lo malo que existe en este mundo, bueno casi, pero es uno de los papeles más icónicos interpretados por Itatí Cantoral, esta villana se volvió uno de los personajes más odiados de la televisión mexicana en su aparición en la telenovela María la del Barrio.

Se convirtió en todo un referente en cuanto a villanos nos referimos, incluso el nombre de Soraya Montenegro ha superado el paso de los años y generaciones que ni siquiera conocen la telenovela, identifican a la perfección a este personaje, sobre todo por su icónica escena con la “maldita lisiada”.

Pero esta no es el único momento brillante de Soraya, ya que, a lo largo de toda la telenovela protagonizada por Thalía, la temible villana hizo un incontable número de fechorías y estas son las mejores de todas.

4 momentos icónicos de Soraya Montenegro

  • Maldita lisiada

Momento de las telenovelas que sigue siendo todo un referente y hasta en meme se convirtió. Soraya solo necesito de un pequeño beso para dejar salir toda su furia contra los jóvenes enamorados.

  • La marginal

Vaya que Montenegro tenía adjetivos denigrantes para repartir por todas partes, pero sobre todo hacia la protagonista de la telenovela, una joven de origen humilde que se puso en su camino y le arrebato a lo que ella decía era el amor de su vida.

  • Nandito

Si algo demostró la villana a lo largo de toda la historia es que no conoce limites y aunque Nandito, literalmente podría ser su hijo, decide seducirlo y llevarlo a la cama, solo para vengarse de sus padres y ponerlo en contra de su propia familia que sabe de lo que ella es capaz de hacer.

  • Su amor por Luis Fernando

A pesar de haber crecido como hermanos Soraya Montenegro esta obsesivamente enamorada de Luis Fernando, aunque lo demuestra muy a su manera.