Este sábado, 19 de octubre, un avión de la aerolínea australiana Qantas, realizó un vuelo este sábado desde la ciudad estadounidense de Nueva York.

El vuelo se dirige a Sídney y tiene como propósito estudiar cómo impactará la duración del vuelo, de 29 horas, sin realizar escalas y cómo resultaría en la salud de los pasajeros.

Este vuelo es el primero de tres que se pretenden realizar como prueba de los nuevos Boeing 787-9 Dreamliners, la ciudad australiana, se unirá con Alondras y Nueva York, cada avión con máximo cincuenta personas, contando pasajeros y tripulación.

En está ocasión el transporte será un laboratorio para seis pasajeros que aplicarán como voluntarios para este nuevo experimento, equipados con dispositivos tecnológicos portátiles.