En el año 2000 pasaron sucesos muy importantes en el mundo, pero, en el mundo del espectáculo la boda de Jennifer Aniston y Brad Pitt fue todo un acontecimiento.
La boda entre Brad Pitt y Jennifer Aniston fue en un acantilado de Malibú, adornado con 50 mil flores, un coro gospel de 40 miembros y más 76.000 euros invertidos en la seguridad.

Entre los invitados estuvieron presentes Salma Hayek, Courtney Cox, Ed Northon y Cameron Díaz. Aunque, se dice que todos, y cada uno de los 200 invitados tuvieron que firmar un contrato de confidencialidad.
El dato del vestido de la novia es una de las cosas que más intrigaba, pues luego de casi 20 años, se sabe que Lawrence Steele quién lo diseñó. Aunque lo que nunca supimos es cómo lucía el vestido completo, pues, solo hay una foto a blanco y negro que no esta completa.

Pero este no es el único dato que ahora sabemos de la imagen de la actriz, los tacones que uso fueron unos de gamuza color marfil hechos por Manolo Blahnik.
Por su parte, el novio eligió un traje negro de Heidi Slimane, mientras sus padrinos posaron con trajes Prada.

Sobre la recepción, se conoce que hubo camarones, caviar y pizza gourmet regada con champagne Dom Perignon, mientras que los platos principales incluían cangrejo, langosta y carne con pimienta.
Aunque todo lo hermoso y perfecto de la boda se acabó en cuatro años, tras el divorcio de la pareja que se debió a un romance de él con Angelina Jolie.