Esta tarde los Dophins lograron lo que muchos no creían, lograron vencer a los Patriotas en el Gillette Stadium, pues lograron un marcador 27 – 24. Muchos fanáticos en redes sociales consideraron est victoria como un milagro.
Recordemos que en la segunda fecha de la temporada, Miami perdió terriblemente 43-0 en su propia casa por este mismo adversario. Sin embargo, esto les sirvió para sacar el coraje y cerrar una década de derrotas constantes.
Fue en 2008 la última vez que los Dolphins ganaban en Nueva Inglaterra, pero este día lo lograron. Con mérito, autoridad, alegría y un excelente juego pudieron llevarse la victoria de la mano de su entrenador Brian Flores.
Uno de los jugadores más importantes que destacó en dicho partido sin duda fue el quarterback Ryan Fitzpatrick, pues completó 28 de 41 pases para 320 yardas ante la mejor defensa de la NFL y además, anotó un touchdown.
Otro de los más importantes fue DeVante Parker, quien ganó 137 yardas en ocho recepciones y lo hizo frente a Stephon Gilmore, uno de los candidatos que aspira a ser elegido como Mejor Defensa del Año en la NFL.
Además, Eric Rowe sorprendió a todos cuando interceptó a Tom Brandy para anotar un touchdown a pocos minutos de que inició el segundo cuarto. Con esto, los Dolphins dejaron claro que iban a ganar.
El último cuarto estuvo lleno de emociones. Sanders con una patada de 32 yardas puso adelante 20-17 a los Dolphins. A falta de 3:53 minutos para terminar el partido, Brady se conectó con James White para un touchdown de 13 yardas.
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Recordemos que no solo las participaciones individuales lograron esta victoria, fue un trabajo en equipo sin duda. Los Dolphins dividieron en tres etapas su juego: ataque, defensa y equipos especiales.
Ahora bien, no hay que olvidar que los Patriotas necesitaban con urgencia ganar, pues eso les hubiera permitido tener el próximo fin de semana libre en el inicio de los playoffs.