La batalla número 229 de la UFC que todo el mundo esperaba por fin se dio, aunque no terminó de la manera deseada, ni para el campeón, ni para los organizadores y mucho menos para el público.
Conor McGregor perdió por sumisión ante el vigente campeón Khabib Nurmagomedov. Pero no antes de haberle dado una notable lección al irlandés.
McGregor casi cae noqueado después de un terrible derechazo.
Una vez terminado el combate, el ruso saltó del octagonal para pelear con el equipo de su rival y desató una batalla campal.
El peleador ruso cayó en las provocaciones de Dillon Danis, sparring del irlandés, con el que se enfrentó en el ringside (primera fila de la jaula) y, ahora, su carrera en el UFC corre peligro.
Después de estas acciones el ruso podría perder la visa para volver a pelear en Estados Unidos y sería despojado de su cinturón, además de recibir una fuerte multa.
Ante esta situación, Khabib Nurmagomedov, más tranquilo y relajado, pidió disculpas a la afición de Las Vegas por la violencia que desató fuera del octágono del T-Mobile Arena.
“Lo siento Las Vegas, lo siento Nevada. Yo no soy así, estaba caliente. Este deporte es respeto, no se puede hablar basura. Quiero cambiar este deporte y que la gente no lo haga. Siento lo que pasó después de la pelea. Mi padre me aplastará cuando llegue a casa. Vladimir Putin me felicitó tras la victoria. Lo culparán a él y no a Conor McGregor por insultarme. Por favor no me quiten el título, no era yo. Soy un humano y cometemos errores. Lo siento Las Vegas, lo siento Nevada. Perdón a todos”. Khabib
Los organizadores aún no le pagan su premio a Khabib hasta saber que decide la Comisión Atlética de Nevada quien le retuvo los 2 millones de dólares que había ganado, por su combate contra Conor McGregor.
Por su parte el irlandés sí cobró los 3 millones que le correspondían al no encontrarse cargos en su contra.
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