Venden dibujo de Donald Trump en 16 mil dólares

domingo, 6 de mayo de 2018 · 15:50

Ciudad de México– Un dibujó del del Empire State Building realizado por el presidente Donald Trump con un marcador negro, un boceto de su época como voraz magnate inmobiliario de Manhattan, fue vendido en una subasta el jueves pasado por la noche en 16 mil dólares.

Según Julien's Auctions, la casa de subastas donde tuvo lugar la venta, Trump realizó el dibujo (de 30 centímetros de alto por 22 de ancho) en su propiedad Mar-a-Lago en Florida para una subasta benéfica que tuvo lugar en 1995.

En ese momento, el boceto firmado se vendió por menos de 100 dólares, conforme a The New York Times.

Parte del dinero que se recaude ahora irá a los fondos de NPR, la radio pública estadunidense.

No es la primera ‘obra de arte’ del magnate en caer en las manos de los coleccionistas a raíz de su presidencia.

En julio, un dibujo de tamaño similar de una vista más completo de Manhattan se vendió por 29 mil dólares en Nate D. Sanders Auctions.

El crítico de arte del rotativo neoyorquino, Pete Schjeldahl, comentó en ese tiempo que el dibujo del ahora presidente no era ni bueno ni malo.

Pero cabe mencionar que la historia del magante con el Empire State Building llena un capítulo dramático en los anales de los inmuebles icónicos de Manhattan.

En 1994, Trump anunció que había adquirido el 50 por ciento del inmueble de la Quinta Avenida de 102 pisos, que según él había caído de su "posición legítima como un activo inmobiliario de clase mundial".

Su sueño convertirlo en un complejo residencial de lujo.

Los titulares del contrato de arrendamiento principal de la torre, incluidos Peter L. Malkin y Leona Helmsley de Empire State Building Associates, no estuvieron de acuerdo, y se produjo una larga batalla legal cuando Trump intentó “usurparlo”.

En 2002, él y el otro propietario del título cedieron y lo vendieron a Malkin y al grupo de Helmsley por 57.5 millones de dólares.

Un representante de Julien's Auctions escribió en una declaración que la obra de arte "simbolizaba su ascenso" a través de las filas de los corredores inmobiliarios neoyorquinos.