Educación

¿Cómo podemos superar el asco y qué funciones tiene?

Conoce cómo se define esta sensación, bajo qué circunstancias se da y cuál es su finalidad al momento de experimentarla.
martes, 18 de mayo de 2021 · 09:20

El ser humano es capaz de experimentar un sin fin de sensaciones durante todo un día, aunque muchas de las veces es difícil identificarlas. Sin embargo, el asco es una de las más recurrentes y una que resulta difícil de ocultar.

Esta sensación suele manifestarse de forma física, pues el cuerpo reacciona ante un estímulo intenso que deriva de alguna situación desagradable que despierta en quien la experimenta cierto nivel de repulsión. Pero ¿sabes qué es exactamente el asco? Aquí te lo explicamos.

¿Qué es el asco?

El asco se define como una emoción básica que las personas hemos sentido más de una vez en la vida, la cual se caracteriza por la experimentación de repugnancia hacia algo, lo cual provoca una alteración en el estómago y esto puede llevarnos a sentir náuseas e incluso derivar en vómito, cuando la repulsión es muy intensa.

En términos psicológicos, el asco es considerada una emoción negativa, ya que se manifiesta cuando vivimos una situación de desagrado, misma que nos pone en un estado de incomodidad. 

Puede ser que algo que a ti te genera asco a otras personas no. Esta diferencia estriba en las diferencias entre un individuo y otro no solo físicas y emocionales, sino también por aquellas vivencias experimentadas en cierto momento de la vida. Sin embargo, hay ciertas situaciones que nos condicionan y nos llevan a sentir asco, tales como alimentos en mal estado o que simplemente no os gustan, falta de higiene, olores fuertes, fluidos corporales de otras personas o animales (esputos, sudor, sangre, orina, excrementos) algunos animales como las ratas, cucarachas, entre otras.

¿Qué funciones tiene esta emoción?

Ya que se explicó qué es y algunas circunstancias que pueden originarlo, el asco, como sucede con otras emociones, también tiene un objetivo que la lleva a presentarse.

Similar a lo que ocurre con el temor, el asco tiene una función de supervivencia, es decir, de mantenerte a salvo de alguna situación de riesgo que pueda vulnerar tu integridad física y comprometa tu salud, pues sentir asco ante un mal olor de algún alimento te ayudaría a prevenir alguna enfermedad gastrointestinal, por ejemplo. Por lo tanto, se trata de una emoción que está orientada a protegerte.

Así puedes superar el asco

Si bien el asco es una emoción básica que deriva en sensaciones físicas intensas, derivadas de una repulsión, es difícil lidiar con su efectos, y más aún, buscar la forma de evitarla. Pese a esta hay ciertos mecanismos o técnicas para hacerle frente y no sentirse tan incómodos cuando la experimentamos.

  • Entiende lo que es el asco, cuáles son sus funciones y qué consecuencias tiene en tu cuerpo y mente.  
  • Trata de comprender porqué tienes que hacer frente a cierto estímulo aversivo. Ejemplo: si no te gusta el brócoli, es necesario que entiendas porqué es necesario que ingieras y que sean consiente de los beneficios que trae a tu salud. 
  • Aplica alguna técnica de relajación para aminorar la sensación de asco y trata de controlar tu respiración.
  • Busca exponerte a ese estímulo que te da asco de forma gradual, de tal manera que poco a poco vayas lidiando mejor con esa aversión y la incomodidad ante ella disminuya con el tiempo.