¿Cuál es el origen e historia del Mariachi?

Quién no ha cantado desde lo más profundo de su pecho al son del Mariachi, ya sea por una pena desgarradora, por gozo o simplemente por alguna festividad mexicana, pero ¿conoces su origen?

El origen del termino Mariachi, es incierto y la teoría más conocida indica que proviene de la palabra francesa 'marriage'; 'boda' o 'matrimonio', y que con el tiempo se trasformo en la palabra mariachi que hoy conocemos. Y es que durante la intervención francesa, los soldados franceses comenzaron a referirse como 'marriage' a la música que se tocaba en las bodas mexicanas.

Sin embargo, muchos estudiosos rechazan esta teoría, pues aseguran que ya existía un termino para referirse a estos conjuntos musicales antes de la intervención francesa. Sobre todo porque los primero grupos (antecesores del Mariachi) datan de la época de la Colonia y son oriundos de Cocula, Jalisco.

Por lo que se cree que se trata de una palabra coca con la que, en la Nueva Galicia, los indígenas de Techaluta daban nombre a un tablado de madera donde realizan sus bailes o zapateados. También, hay quienes afirma que el nombre deriva del árbol -hoy desconocido- con cuya madera se construían dichos tablados.

Otra versión afirma que es una palabra mestiza formada por el castellano 'María' y el coca 'shi', 'son' , y se refiere a las letras (en honor a María) y música (sones) que los habitantes de Cocula utilizan para adorar a la Virgen de la Pila (la Inmaculada Concepción), llevada al territorio por Fray Miguel de Bolonia en 1528.

Si bien su origen es incierto y aún existen muchas discrepancias, lo cierto es que la música de Mariachi sí tiene un lugar de origen establecido y reconocido: Cocula, en Jalisco.

Nace de la fusión de caracolas, teponaztlis, huéhuetls, flautas de carrizo o barro con guitarras y violines; debido al mestizaje instrumental, en 1695 los cocas inventaron la vihuela y, posteriormente, el guitarrón. Se sabe que para la década de los 30 del siglo XIX ya existían dos mariachis en Colula: el Coculán y el Chivatillo, de los que surgió el Mariachi Salinas, patriarca de los grupos de música vernácula, gracias a que sus instrumentos se componen por un guitarrón, dos violines, una vihuela y una chirimía.

A finales del XIX fueron varios los mariachis que se dieron a conocer en Cocula y en Tecalitlán. Su llegada al la Ciudad de México se sita en 1896 en cuerdas y voz del grupo de José García. Posteriormente, a principios del XX, el Mariachi de Cirilo Marmolejo impuso el traje de charro en su conjunto musical y fue entonces, a raíz de ellos, que varios grupos lo imitaron. El porfiriato no fue una buena época para el mariachi, ya que, al igual que el tequila, se le consideró propio de las clases bajas; no obstante, se registran un par de ocasiones, en 1905 y en 1907, respectivamente, en las que Porfirio Díaz celebró con música de mariachi fiestas: la de su onomástico y otra en honor al secretario de estado norteamericano, Elihu Root.

Con la Revolución, una gran arma del del movimiento fueron los corridos, mismos que posteriormente nutrirían las letras del mariachi. Ya con el país pacificado, se empezaron a filmar las llamadas películas rancheras , en las que el mariachi tuvo el sitio de honor.

Para los años 30 (del XX) se introdujo la trompeta en el mariachi y, en 1936, Lázaro Cárdenas, candidato a la Presidencia de México,  invitó al Mariachi Vargas de Tecalitlán (fundado en 1898 por Gaspar Vargas) a su campaña electoral por la República, lo que dio por resultado una reapreciacioón del género de música vernácula,  mientras que el grupo de los Vargas se convirtió en modelo a seguir para los grupos nacionales e internacionales, marcando un parteaguas para la música y la identidad mexicana.