Aprende en casa

¿Cuáles son las diferencias entre la poesía, los cuentos y los textos informativos?

Alumnos en todo México se encuentran trabajando a través de la plataforma 'Aprende en Casa'. Esta es la respuesta a una pregunta de las más solicitadas.
jueves, 21 de mayo de 2020 · 11:45

Para muchos, escribir es un placer y gustan de hacerlo en todas sus formas. A veces, sus sentimientos son los que se plasman y en ocasiones, algunas historias, reales o ficticias, son las que imperan.

Por esta razón es que existen los géneros literarios e informativos, pero ¿cuales son sus características? ¿En qué se parecen? ¿Qué es lo que los distingue? Estas dudas y otras más son las que responderemos a continuación.

Sabemos que existen diversos tipos de textos y que no todos se leen de la misma forma. Y aunque de verdad son bastantes los géneros, podemos ubicarlos por dos tipos: literarios e informativos.

Los textos informativos nos transmiten ideas y, como su nombre lo dice, nos informan sobre diferentes temas: política, deportes, espectáculos, filosofía, historia, etc. Estos textos vienen escritos en periódicos, libros de texto o artículos por internet.

En cambio, los textos literarios además de transmitirnos ideas, nos transmiten emociones, estados de ánimo o historias. Se dividen en varios géneros como lo son la poesía, la novela, el cuento, la fábula, etc.

¿Cuáles son las diferencias entre la poesía, los cuentos y los textos informativos?

A los textos literarios les importa más la "belleza" que el contenido mismo; son una expresión artística. Es por esto que debemos de tomar en cuenta que las respuestas a preguntas dadas sobre un texto literario, no son "literales", sino ambiguas. Los análisis que se hacen de novelas, poemas o cuentos, son necesarios para comprender completamente de lo que se habla o la motivación del autor a realizarlos.

Por el contrario, los textos informativos son totalmente literales. Se explica de forma clara y objetiva el tema en cuestión y el autor no debe imprimir en el texto su opinión, estado de ánimo o sus intereses. Aunque sí se dirige a un público específico, este será escrito con el lenguaje apropiado para sus lectores, además de evitar la ambigüedad en sus líneas o el lenguaje retórico.