Hoy, 8 de junio de 2020, se celebra el Día Mundial de los Océanos, fecha que surgió a partir de una iniciativa canadiense y fue aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas, el 5 de diciembre de 2008.

Personas e instituciones en todo el mundo conmemora este día con diversas actividades cuyo propósito es mantener en la memoria el hecho de que “cada vez más, la salud del océano está íntimamente ligada a nuestra salud”.

Los organismos que viven bajo las profundidades del mar son sumamente importantes en la época en que vivimos; gracias a ellos existe la posibilidad de encontrar cura para distintas enfermedades, como el Covid-19.

Asimismo, las especies marinas aportan servicios ecosistémicos indispensables como la generación de oxígeno y son el sustento de miles de trabajadores que depende de actividades en la biodiversidad marina y costera.

El alimento que consumimos, el combustible que se utiliza para mover al mundo y, sobre todo, la mayor parte del oxígeno que respiramos, proviene de los océanos.

La Organización de las Naciones Unidas estableció la fecha como recordatorio y conciencia en las sociedades, para que éstas se involucren más en el cuidado de mares y playas, ya que día con día, el ser humano realiza actividades que llegan a dañarlo significativamente.

El objetivo central es “poner en marcha un movimiento mundial ciudadano a favor de los océanos. Esta celebración es un buen motivo para celebrar juntos la belleza, la riqueza y el potencial de los océanos”, indican.

Este año se cumple la decimonovena edición del  festejo bajo el lema: “innovación para un océano sostenible”.

La vida humana no sería posible sin la existencia de este sistema; es importante cuidarlo y, de ser posible, realizar actividades en su beneficio.

Por el momento, la ONU coopera con diferentes naciones en proyectos que logren conectar la ciencia oceánica con las necesidades de la sociedad.