Con ya 3 temporadas expuestas, Survivor México se convirtió rápidamente en uno de los shows más vistos no sólo en la programación de Azteca, sino también frente a proyectos de distintas cadenas que consiguió empañar a través de la exigente aventura que encaran los que la integran.
Sin embargo, tal como se ha visto a lo largo de las entregas, la competencia de los miembros no siempre es buena puesto que muchas veces ocurren desenlaces que inevitablemente perjudican a los demás, por lo tanto, lejos de presentar una contienda sana y con enseñanza, el concurso se vuelve una batalla que quizá no deberían ver los pequeños.
Y es que en Survivor México se ejecuta una fuerte pelea por seguir adelante a través de estrategias que carecen de ética y de valores ya que se rompen la mayoría de las reglas, de tal forma que el polémico reality, al menos por ahora, es una transmisión que los menores del hogar no deberían seguir.
¿Por qué tus hijos no deben ver Survivor México?
- Rompen las reglas
Las constantes faltas en el trayecto de Survivor México exhiben innumerables quebrantamientos a las normas del show que van desde entrar con sustancias prohibidas, traicionar a los demás y jugar con trampas en los combates de los ciclos.
- Roban sin consecuencias
Otro acto imperdonable en la aventura de las tribus se presentó cuando el equipo amarillo, Jaguares, robó comida de zonas prohibidas y mejoró su estancia en el refugio con elelemtos que tampoco están permitidos.
- Abusan de los demás
Algunos de los contendientes más fuertes de Survivor México crean estrategias cuyo objetivo es perjudicar no sólo a componentes de los grupos adversarios, sino también a concursantes de la misma fila que engañan o traicionan para salvar su lugar.
- Manipulan al resto
Con tal de favorecer su desempeño, varios integrantes del reality toman el control de la situación con técnicas de persuasión que nublan los pensamientos de otros hasta el punto de originar su salida.
Todas las razones expuestas son parte del actual desarrollo de Survivor México, por lo tanto, el programa no ofrece una contienda sana y justa de la que puedan aprender los pequeños.