-‘Bueno, Swedenborg no era sólo un místico, entendió muy bien que todo en el mundo natural tiene una contraparte en el reino espiritual‘.
–Mi problema con Swedenborg es su comunicación con Ángeles y fantasmas, glorificando la muerte como este gran pasaje.
Sin duda este es uno de los primeros diálogos entre los personajes que marca el camino y sentido de esta película.
Una obra que se sitúa entre el misterio del más allá, la oscuridad y la luz, atrayendo a cada alma a su lugar.
La apariencia de las cosas es una película dirigida por Shari Springer Berman y Robert Pulcini, un equipo de cineastas que ya ha logrado establecer buena mancuerna puesto que han trabajado juntos con anterioridad y alcanzado los elogios de La Academia por Esplendor Americano (tengo que verla).
Lo que comienza como un largometraje paranormal va tomando poco a poco los tintes del thriller y nos deja una mezcla muy buena entre ambos géneros; mientras que las actuaciones de Amanda Seyfried y James Norton son espectaculares.
Este estreno de Netflix me recordó un poco a Terror en Amityville, pero con un giro místico más poderoso, donde se habla del mundo espiritual y cómo nuestra esencia repercute en el mundo que seguiremos después de muertos.
Una casa ¿maldita?, un esposo ¿perfecto?, un asesinato que pronto estará por repetirse. Fantasmas, sangre y un final asombroso. Una peli para disfrutar a oscuras definitivamente. Tiene un 9, corre a verla.
Puedes conocer más del autor en su cuenta de Twitter: @Zoe_Darks
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