Twitter: @Marioliva4
No sabemos cómo un planeta tan lleno de desigualdad y falta de acceso a servicios básicos, podrá recuperarse de el reto global que significa el COVID19. Pero la oportunidad de aprender sobre lo importante está ahí.
Lo que sí sabemos, es que la degradación ambiental es sin duda un factor que ha desencadenado esta crisis. No es casualidad que el foco de infección se haya desarrollado en el mercado de carne y animales salvajes en Wuhan, China. La precariedad que se agudiza por la crisis climática global ha sido el combustible perfecto, ironías a parte.
Esta pausa obligada, le está haciendo bien al planeta.
En estos días vimos videos de ballenas felices en Acapulco, y en otras partes del planeta osos, delfines, venados, patos, jabalíes deambulando en centros urbanos. Es posible que las emisiones de gases Efecto Invernadero (GEI) sean menores que las emisiones en 2019, aunque existe el riesgo de que se retomen con mas fuerza algunas actividades para 2021, como pasó con la crisis económica en 2008 en USA.
¡La naturaleza reclama lo suyo!
Ante la ‘desaparición’ humana por el coronavirus #QuedateEnCasa ? diversos animales salvajes ?? salen a las calles en diferentes partes del mundo ? ¡Creando postales nunca antes vistas! pic.twitter.com/5C13dgZJtG
— Gluc (@GlucMx) March 22, 2020
Es momento de apoyar y solidarizarse, de pensar en comunidad, comprar local, apoyar proyectos alternos en la medida de lo posible. Y sobre todo, tener en claro que consumir, también es elegir.
Es importante también, planear bien los recursos y evitar el desperdicio de comida, antes de la crisis, la cifra promedio de desperdicio de comida era del 30%, que se iba directo a la basura. Ahorrar, cuando se tiene acceso a la energía y el agua.
Hay que recordar que enfrentaremos meses en sequía y ya muchas personas en el país sufren de desabasto o no tienen acceso a agua potable.
Te puede interesar: ‘Yo Consumo Local’ la iniciativa para superar la cuarentenaMuchas iniciativas están surgiendo, y si bien hay muchas voces advirtiendo de un nuevo orden mundial que beneficia a los de siempre , es también una oportunidad para reimaginar qué tipo de ajustes hay que hacer, para alimentar la empatía.
Tal vez, la pregunta obligada una vez que esta pandemia esté controlada, será si aprendimos lo suficiente como para apreciar lo mas importante y construir una sociedad mas justa, mientras nos concentramos en la tarea mas grande y pendiente de todas: la crisis climática global.
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