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Este “mes del amor” y recién pasado San Valentín me puse a pensar en que el amor genera turismo, (además de maripositas en el estómago y todo eso) de hecho, a manera personal estar con tu persona favorita  viajando, podría ser considerado turismo romántico, pero en realidad el turismo de romance es una categoría “oficial”; el turismo de bodas o de romance atrae muchos visitantes a nuestro país y ha sido muy bien capitalizado por los destinos y es de tal relevancia que incluso existe la certificación de Destination Wedding Specialist.

De acuerdo a la SECTUR, México recibe el 23% de turismo de romance a nivel mundial, el gasto promedio por persona es de mil quinientos pesos y se llevan a cabo alrededor de seiscientas mil bodas anuales.

En nuestro país se realizan 600 mil bodas al año, de las cuales 70 por ciento se llevan a cabo en las playas del Caribe mexicano. Según las cifras oficiales, los enamorados extranjeros que eligen a México como destino para expresar su amor prefieren hacerlo en Cancún y la Riviera Maya, Cozumel, Los Cabos, Puerto Vallarta y San Miguel de Allende.

En tanto los enamorados nacionales optan por Morelos, Acapulco, Oaxaca, Guanajuato, Querétaro, San Miguel de Allende, Riviera Maya–Cancún, Los Cabos, Riviera Nayarit, Mérida y Puebla, a esta lista selecta de ciudades para casarse, el estado de Hidalgo se apuntó a fines del año pasado con la campaña Cásate conmigo, que tiene como objetivo presentar los diferentes destinos que ofrece el estado para llevar a cabo una “boda de ensueño”.

Para ello, hay habilitadas 160 haciendas, balnearios y parques ecoturísticos listos para la diversión de los enamorados, familiares, amigos -y colados-.

Para que un destino sea atractivo para llevar a cabo una boda, además del venue, los prestadores de servicios y el alojamiento para todos, debe ofrecer opciones de entretenimiento, para que “valga la pena la vuelta” e Hidalgo responde a estas necesidades pues cuenta con hermosos paisajes, cultura, ríos, lagos, haciendas, templos y una deliciosa gastronomía cautiva a diferentes públicos, tanto jóvenes como adultos.

Cásate conmigo no solo busca seducir a las parejas, también pretende fortalecer la marca Hidalgo Mágico para dar a conocer sus Pueblos mágicos y Pueblos con sabor.

Así que piensas contraer nupcias pronto, contempla una visita de inspección a Santa María Tecajete, Zempoala,  Huasca de Ocampo, Pachuca de Soto, San Miguel Ometusco, Acaxochitlán, Cuautepec de Hinojosa, o Tepeji del Río que son algunos de los municipios de Hidalgo que conservan catedrales y haciendas con más de 400 años de antigüedad.