El presunto captor, que fue identificado como Francesco Amato, y que el pasado miércoles lo sentenciaron a 19 años años de cárcel tras un juicio en contra de la Ndrangheta, una organización criminal italiana, entró armado con un cuchillo a la oficina postal de la ciudad Reggio Emilia, de acuerdo con la agencia Ansa. Tomó a cinco personas como rehenes.
Según medios, el sujeto, que junto con otras 124 personas fue condenado a cárcel tras ser sometido al mayor juicio contra un grupo criminal en Italia, se encontraba prófugo. Pero a las 12:30 hora local de este lunes tomó la oficina de correos. Hizo que saliera a un grupo de cleintes, pero obligó a otros cinco empleados del lugar, entre ellos a la directora, a permanecer encerrados.
Hasta el momento no ha habido ninguna actualización sobre la liberación de los rehenes: solamente de una empleada que fue puesta en libertad. Sin embargo, según medios locales, el sujeto no parece estar dispuesto a colaborar. Una de sus peticiones ha sido hablar con el ministro de Interior, Matteo Salvini.
A las afueras del edificio postal, las autoridades desplegaron elementos policiales, mientras que el agente del Ministerio Público, Iacopo Berardi, y el fiscal, Marco Mescolini, entraron en negociaciones con Amato.
Del proceso conocido como Aemilia, el exjugador de la Juventus, Vincenzo Iaquinta, también fue sentenciado con dos años de prisión, luego de ser declarado culpable de posesión ilegal de armas.