El futuro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte depende de las negociaciones de Estados Unidos y Canadá. El pasado viernes se cumplió la primera fecha límite que el Congreso de EU propuso y esta semana las negociaciones no parecen ver una pronta resolución.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, mencionó recientemente que su país solo firmará un tratado que sea beneficioso para su país: “Ningún TLC es mejor que un mal TLC para los canadienses y en eso vamos a perseverar”.
Los temas claves que mantienen las negociaciones paralizadas son el Capítulo 19 (del cual México convino con Estados Unidos deshacerse) y las protecciones a las industrias audiovisuales y culturales canadienses.
Al respecto de estos temas, Trudeau se mostró firme: “No firmaremos un acuerdo que sea malo para los canadienses y, francamente, no tener un Capítulo 19 para asegurar que las normas sean respetadas, sería malo para los canadienses”, dijo sobre el apartado de los paneles antidumping.
“Es inconcebible para los canadienses que un medio estadounidense pueda comprar un medio canadiense; ya sea un periódico, una cadena o un grupo de televisión. Eso sería abandonar nuestra soberanía y nuestra identidad”, se pronunció sobre el segundo.
Tales declaraciones se hicieron un día antes de que se reanudaran las mesas de negociación entre Canadá y Estados Unidos.
Por su parte, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, aseguró que espera que ambas partes lleguen a un acuerdo este mismo viernes.