María Elena Ferral, directora del diario Quinto Poder y reportera de El Diario de Xalapa, falleció la tarde de este martes a consecuencia de un ataque sufrido en las calles del centro del municipio de Papantla, Veracruz.
La periodista veracruzana se dedicaba principalmente a la cobertura de nota roja y antes ya había reportado amenazas de muerte en su contra y ataques de políticos del estado. Cabe mencionar que Veracruz es la entidad más peligrosa para ejercer el periodismo y María Elena Ferral se convirtió en la periodista número 23 en ser asesinada en la región.
Te puede interesar: Senado reforma leyes para evitar violencia política contra mujeres
También lee: En plena contingencia, AMLO saluda de mano a la mamá de El Chapo
Según reportes oficiales, fue alrededor de las 2 de la tarde del día lunes 30 de marzo cuando María Elena Ferral salió a realizar unas gestiones de notaría cuando ocurrió el suceso. Estaba a punto de abordar su vehículo cuando un individuo a bordo de una moto disparó contra la periodista.
Fueron 3 impactos de bala los recibidos: uno en la pierna, otro en el brazo y un último en el abdomen. Llegó a un hospital de la región, gravemente herida, y falleció varias horas después.
Entérate: Juez ordena la liberación de Diego Cruz integrante de Los Porkys
Sigue leyendo: Primer muerto por Covid-19 en Puebla era camillero y contagio a su familia
En el pasado, precisamente en 2016, la periodista había denunciado a Camerino Basilio Picazo Pérez, exalcalde de Coyutla y entonces candidato del PRI a diputado local por el distrito de Papantla, sobre amenazas que había recibido en su contra. Esto, en un video subido a internet.
“Vuelvo a vivir, otra vez, una serie de amenazas contra mi persona. Siento temor y no soy yo, hay documentos que lo demuestran”, aseguraba en el video donde se muestra a la periodista en un restaurante.
Ayer, cuatro años después de esas amenazas, María Elena Ferral fue asesinada cerca de su vehículo en las calles de Papantla. Cabe mencionar que ella cubría la zona conocida como sierra de Papantla, donde las desapariciones forzadas son constantes.
A continuación: Roban cuadro de Van Gogh de un museo cerrado por coronavirus