Antonio Rosique es uno de los hombres más respetados por los deportistas de Exatlón México, la forma en la que narraba sus carreras, así como los amplios conocimientos que tiene, han hecho que se gane la admiración y cariño de muchos, sin embargo, eso no quita que el periodista es una persona que tiene una vida común, tanto que incluso tiene un apodo bastante popular.
Seguro te has llevado una gran sorpresa al descubrir que al comunicador, a quien muchos siguen tras su desempeño en el reality de TV Azteca, también lo conocen en el mundo deportivo como “Manos de gasero“, algo que quizá ya sabías si eres fan de sus 25 años de trayectoria, pero si no es así, ha sido el propio cronista quien reveló por qué le dicen así.
Su experiencia en Exatlón México
A través de una entrevista remota con Javier Alarcón, transmitida en el canal de YouTube del mismo el pasado primero de noviembre del 2020, el famoso confesó desde República Dominicana que ser el relator de este programa ha sido “un privilegio”, y recordó cómo fue que ingresó a la producción, donde lo invitaron a participar para hacer la versión mexicana del programa de origen turco.
El conductor confesó que poco a poco le dio sentido a su personaje dentro del reality, y a lo largo de los cuatro años que lleva al aire ha ido madurando, pero esto también le sirvió para acercarse a un nuevo público al que antes no tenía alcance ya que su audiencia en TV Azteca antes de Exatlón México era de adultos y aficionados a los deportes como el futbol o las olimpiadas.
Así mismo, el presentador reconoció que ahora los niños y la gente adulta lo saludan y lo ven con admiración, un regalo que le ha dejado estar en el reality, y luego de hablar sobre ello, no evitó mencionar a sus amigos de la televisora del Ajusco quienes le pudieron un popular apodo.
Antonio Rosique revela por qué le dicen ‘Manos de gasero’
“Toño”, como otros lo conocen, nos dejó sorprendidos por las cosas que expuso en la charla y es que en algún momento de la plática, el famoso recordó la buena amistad que tiene con Christian Martinoli.
Y es que este último personaje es clave en la historia pues de acuerdo con la máxima autoridad de Exatlón, fue él quien se convirtió en un soporte en su crecimiento laboral, no obstante, también fue este quien en una de sus ocurrencias y momento de simpatía le puse ese nombre.
Rosique recordó que años atrás, él solía irse a correr todos los días por las mañanas en Los Viveros de Coyoacán, un ritual deportivo que terminaba bebiendo un jugo de zanahoria por al menos dos meses seguidos, entonces, las palmas de sus manos comenzaron a pintarse de color naranja.
A eso se sumó que él es daltónico, por ello, los contrastes de color no logra percibirlos con claridad, además, confesó que sus manos son grandes y pesadas, entonces, en una ocasión Martinolli le preguntó por qué sus manos estaban de color naranja, y le recordó que parecían los guantes que usaban los “cuates” del gas.
Fue a partir de ahí cuando Christian le dijo que tenía “Manos de gasero“, un apodo que se le quedó, y aunque el color de las manos se fue, el sobrenombre pasó a la historia. Puedes ver el momento en el que hace su revelación en el siguiente video y si quieres ver la entrevista completa da clic aquí.